La vida de Meghan Markle y el Príncipe Harry en Estados Unidos es un completo desastre

La inseguridad y los problemas económicos ahogan a los Duques de Sussex

No corren tiempos nada sencillos para el Príncipe Harry y Meghan Markle. Los Duques de Sussex llevan mucho tiempo viviendo a disgusto en Montecito, donde están muy lejos de encontrar esa paz y tranquilidad que tanto auguraban cuando se mudaron a Estados Unidos y se alejaron completamente de la Casa Real de Gran Bretaña. En este sentido, la inseguridad y los problemas de la pareja relacionados con la mala gestión de sus finanzas han provocado más de un conflicto interno y que los que conviven con Meghan y Harry comiencen a definir su vida en Estados Unidos como un desastre.

En este sentido, tal y como hemos podido saber, el principal dolor de cabeza de los Duques de Sussex es la preocupante falta de seguridad que hay dentro de Montecito. Los robos nocturnos han pasado de ser algo que solo pasaba muy de vez en cuando a ser algo que forma parte del día a día del vecindario. Cuando no es una mansión es otra la que es asaltada durante la noche por los criminales. Una situación que todavía no ha afectado a los Duques de Sussex, pero sí a sus vecinos.

Meghan y Harry ya buscan un traslado

La realidad es que Meghan Markle y el Príncipe Harry viven muy a disgusto en Montecito, se sienten inseguros y creen que esto no puede seguir así. Es por este motivo que han comenzado a sondear la posibilidad de mudarse. Sin embargo, saben que vender ahora la mansión en la que viven supondrá una pérdida millonaria. El mundo es consciente de la inseguridad que rodea esa zona y el valor de esos terrenos ha bajado sustancialmente, provocando un problema económico importante en la pareja.

Además, tal y como se ha ido revelando, Meghan es incapaz de gestionar correctamente su patrimonio. La Duquesa de Sussex no sabe ahorrar ni dejar de comprarse todos los lujos que quiere. Es por este motivo que ya ha habido más de una pelea en el seno de un matrimonio donde no ven un futuro nada esperanzador por delante.

Así pues, el sueño americano de Meghan Markle y el Príncipe Harry no acaba de ir tan bien como esperaban. Su vida se ha convertido en un completo desastre y la deriva de su vida va de una forma que ninguno de los dos quería.