La reina Sofía vive días negros rodeada de médicos por el deterioro progresivo

Irene de Grecia ya no puede vivir sin atención médica constante

El estado de salud de la tía Pecu, hermana de la Reina Sofía, no hace más que empeorar de forma progresiva y sin cesar. Desde que le detectaron Alzheimer, Irene de Grecia ha sufrido un deterioro cognitivo continuado en sus capacidades mentales que ha acabado provocando que no pueda vivir sin tener atención médica durante las 24 horas del día. De hecho, la hermana de la emérita ya no se puede valer por ella misma, vive en una silla de ruedas y ha dejado de reconocer a sus seres queridos. Todo un drama para Sofía que ve como su hermana está dejando de ser ella misma.

Para cambiar de aires y pasar unos días agradables en la costa de Mallorca, Sofía se llevó a su hermana hasta el Palacio de Marivent, un espacio donde se suele sentir mucho más liberada y sin la presión de tener cerca a Letizia. Sin embargo, no han sido los días más agradables para la emérita, que ha pasado los días rodeada de los médicos que cuidan a Irene de Grecia durante todo el día.

Esta situación ha comenzado a pasar una seria factura a la Reina Sofía. Y es que, a pesar de que está estupenda, los 86 años están comenzando a pesarle en todos los sentidos. Físicamente, está lejos de estar en perfectas condiciones, mientras que anímicamente se encuentra en el momento más bajo de su vida. La emérita no hace más que ver como sus seres queridos fallecen y eso le da auténtico pavor.

Sofía se siente más sola que nunca

A pesar de que Irene Urdangarin y Victoria Federica han pasado mucho tiempo con ella a lo largo del último año, la realidad es que la Reina Sofía se siente muy sola allá a donde vaya. Ya no puede socializar como solía hacerlo y el deterioro de su hermana la ha dejado sin la que siempre ha sido su mejor aliada. Todo esto ha dejado muy mermada a la emérita, que necesitará ayuda psicológica para salir adelante.

Así pues, ni en Zarzuela ni en Marivent. El crítico estado en el que se encuentra Irene de Grecia ha dejado muy tocada a la Reina Sofía que viene de pasar unos días absolutamente negros en Marivent, donde ha estado más rodeada de médicos que de otras personas.