La infanta Sofía pidió a su padre estudiar fuera de España porque no quiere vivir en Zarzuela con Letizia

La obsesión de Letizia con la alimentación harta a su hija

La Casa Real ya ha comunicado oficialmente el futuro de la infanta Sofía. Hace unos meses confirmó que la benjamina de la familia no realizaría la formación militar, ya que en su caso no es obligatoria. En un principio se pensó que Felipe VI y Letizia optarían por la misma educación para ambas hermanas, pero finalmente se ha seguido un camino distinto. Sofía no repetirá el modelo de Leonor y tampoco el de su madre: irá directamente a la universidad. Y no a cualquier universidad. La hermana menor de la heredera estudiará en el Forward College, un centro que ofrece formación en distintas ciudades de Europa. Cursará Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales en Lisboa, París y Berlín.

Y es que Sofía no quiere quedarse en Madrid. Ni siquiera en España. Su deseo de vivir fuera va más allá de la experiencia académica: quiere sentirse libre. Ya lo descubrió en Gales, donde pudo disfrutar de una independencia desconocida dentro de Zarzuela. Allí respiró, hizo amigos sin la presión de ser una infanta y aprendió lo que significa ser una joven normal. Esa libertad no está dispuesta a perderla ahora.

Lo más lejos de Letizia, mejor

La realidad es que detrás de esta decisión también hay un motivo mucho más personal. La infanta Sofía no quiere pasar más tiempo en Zarzuela ni bajo las órdenes de su madre. Letizia siempre ha sido extremadamente exigente con sus hijas, imponiendo normas severas en todos los aspectos de su vida, incluso en la alimentación. Esa falta de margen ha dejado huella en Sofía, que ha vivido su adolescencia marcada por imposiciones constantes. Por eso se lo pidió directamente a su padre: quería irse de España, quería escapar de Letizia, y Felipe VI lo entendió.

De este modo, Sofía construirá su vida con un margen de libertad mayor. Durante cinco años estará fuera, y después planea realizar un máster en Estados Unidos, el destino que ella soñaba pero que Letizia le negó en primera instancia. La hermana pequeña de Leonor tendrá la oportunidad de trabajar, viajar y formarse sin la presión que soporta la heredera.

Así pues, la decisión de Sofía refleja algo más que un plan académico. Es un acto de rebeldía silenciosa contra la falta de aire que ha sentido en Zarzuela y, sobre todo, contra el control de una madre que nunca le permitió ser ella misma.