La infanta Elena, enamorada, obligada a acabar con la relación

En Zarzuela consideraban que Elena podía acabar muy mal

La infanta Elena siempre ha sido la persona de Casa Real más cercana al Rey Juan Carlos I. La hija mayor de los eméritos siempre destacó por acatar sin rechistar todas las decisiones que tomaba su padre, el cual, fue moldeando la vida de su hija mayor, según los intereses de Zarzuela. En este sentido, mientras que Juan Carlos I y la Reina Sofía aceptaron de buen grado que Elena se casara con Jaime de Marichalar y tampoco se opusieron a su divorcio, sí que tuvo una gran influencia en una de las siguientes relaciones de la infanta Elena, a la que elsus padres siempre trataron de proteger de ciertos perfiles de hombres.

De esta forma, a pesar de que, desde el divorcio, la infanta Elena parecía haberse cerrado al amor, hubo un hombre que logró captar la atención de la infanta. Se trata de Álvaro Muñoz Escassi, un famoso jinete más conocido por sus líos de cama con las mujeres que por otra cosa. Hecho que llevó a que la Reina Sofía y a Juan Carlos I, a presionar a su hija par que se distanciara de un Escassi al que consideraban un hombre, cuyas intenciones podían ser muy peligrosas y que podía acabar haciendo mucho daño, tanto a Elena, como a la Casa Real.

Sofía se negó a aceptar a Escassi en Zarzuela

La realidad es que la Reina Sofía, sabía de buena tinta cuáles eran las costumbres de Escassi con sus parejas, a las que siempre acababa engañando. Una situación que llevó a la madre de Elena a negarse rotundamente a aceptar a un hombre como el jinete. Pues, si algo no quería la emérita era que su hija mayor sufriera lo mismo que vivió ella en su matrimonio con Juan Carlos I, de modo que provocó que la infanta Elena mantuviera una relación sentimental con Álvaro Muñoz Escassi.

La intervención de la Reina Sofía, clave para salvar a Elena

Con el paso del tiempo ha quedado claro que la intuición de la Reina Sofía no iba por mal camino. Y es que, hasta la actualidad, Escassi ha sido incapaz de mantener la estabilidad en ninguna de sus relaciones de pareja, donde siempre ha acabado engañando y haciendo daño a las mujeres que han decidido confiar en él.

Así pues, para proteger, tanto a Elena como a la Casa Real, la Reina Sofía, con el beneplácito de Juan Carlos I, se negó rotundamente a aceptar la relación entre la infanta Elena y Álvaro Muñoz Escassi. Pues consideraba que era un hombre muy peligroso para el futuro de todos.