Juan Urdangarin da por acabada la relación con su novio de Londres

La vida de Juan Urdangarin nunca ha sido sencilla. El hijo mayor de la infanta Cristina fue quien cargó con la peor parte cuando su padre, Iñaki Urdangarin, se convirtió en el foco de todas las críticas y burlas en su etapa de colegio. Una situación que obligó a Juan a mudarse con su madre y hermanos a Estados Unidos, para más tarde regresar a Europa, aunque nunca a España, sino a Londres, donde había logrado cierta estabilidad.

Allí, Juan consiguió abrirse paso en lo que más le apasiona: el mundo del motor. Sin embargo, esa estabilidad en el plano profesional no ha sido igual en el personal. Y es que, a pesar de que parecía haber encontrado la calma con su novio inglés, la realidad es que su relación ha sido un ir y venir constante de peleas, reproches y rupturas temporales.

No ha conseguido pasar página tras la infidelidad

El pasado verano, la relación de Juan con su novio atravesó su peor momento tras una infidelidad que rompió la confianza entre ambos. Aunque intentaron seguir adelante, lo cierto es que Juan nunca ha conseguido pasar página y, con cada discusión, el fantasma de aquella traición volvía a colocarse entre ellos.

A esto se suma que, en los últimos meses, Juan decidió abrir las puertas de su casa a sus hermanos, Miguel e Irene, quienes se desplazaban constantemente a Londres para visitarlo. Una situación que acabó por saturar a su pareja, quien le pidió más intimidad y menos visitas de sus hermanos. Un comentario que Juan no soportó, desatando una fuerte discusión que terminó con Juan haciendo las maletas y dejando la convivencia.

Vuelve a Zarzuela este verano

Así las cosas, tras perdonar una infidelidad y tras mil y una discusiones, Juan ha decidido dar por acabada la relación con su novio inglés. Una ruptura que, según nos confirman, ha sido “un descanso temporal” que, en realidad, tiene pocas posibilidades de reconciliación.

Con la situación en Londres rota, Juan volverá a pasar el verano en Zarzuela junto a sus hermanos, donde ya se están preparando las habitaciones para recibir a Irene, Miguel y Victoria Federica. Un regreso que no hará ninguna gracia a Letizia, pero que permitirá a Juan refugiarse en su familia tras un año emocionalmente agotador.