Juan Carlos I fue informado por el servicio secreto de infidelidades reiteradas a la infanta Cristina

El emérito sabia que Iñaki Urdangarin le era infiel a su hija la Infanta Cristina.

En las sombras de la monarquía española se esconde un oscuro secreto que ha marcado la vida de la infanta Cristina. Nuevas revelaciones apuntan a que el rey Juan Carlos I, padre de la Infanta, habría estado al tanto de las infidelidades de Iñaki Urdangarin hacia su hija desde mucho antes de la boda y, lejos de intervenir, habría ordenado a los servicios secretos investigar al entonces yerno. 

Según fuentes cercanas a la Casa Real, el emérito habría sido informado por los servicios secretos de las múltiples relaciones extramatrimoniales que mantenía Iñaki Urdangarin, incluso meses antes de su enlace con la infanta Cristina. A pesar de conocer esta información, el monarca habría decidido seguir adelante con la boda, priorizando la imagen pública de la familia real. 

La investigación de los servicios secretos de Juan Carlos  

Los servicios secretos españoles habrían desempeñado un papel clave en esta trama, encargándose de investigar a Iñaki Urdangarin y de informar a Juan Carlos I sobre sus actividades.  

La decisión del Rey de mantener en secreto las infidelidades de su yerno podría interpretarse como un intento de proteger la imagen de la monarquía y de evitar un escándalo que pudiera poner en peligro su estabilidad. Sin embargo, esta decisión ha tenido consecuencias devastadoras para la infanta Cristina, quien se vio obligada a vivir durante años con la mentira, para más adelante terminar en divorcio. 

El romance secreto de Iñaki Urdangarin 

El secreto de Iñaki Urdangarin no duró mucho, pues con el tiempo se desmintió a sí mismo cuando se dio a conocer el origen de su actual relación. Mientras aún estaba casado con la infanta Cristina, el ex deportista y Ainhoa Armentia desarrollaron una relación que, según algunas fuentes, habría comenzado como una amistad en el ámbito laboral. Sin embargo, con el tiempo, esta amistad se transformó en un romance. Las salidas juntos, las cenas y los paseos por la ciudad empezaron a levantar sospechas tanto en la prensa como entre los allegados a la familia. 

El descubrimiento de la relación entre Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia fue un golpe duro para la infanta Cristina, quien, a pesar de los problemas legales y personales que ya enfrentaba su marido, se mantuvo a su lado. La publicación de fotos del padre de sus hijos y la especialista en Administración y gestión de empresas desencadenó una oleada de especulaciones y críticas, no solo hacia el ex duque de Palma por su infidelidad, sino también hacia la gestión de la situación por parte de la Casa Real. 

La relación extramarital añadió una tensión significativa a la familia Borbón. La infanta Cristina, conocida por su discreción y lealtad, se vio forzada a lidiar con la humillación pública y el dolor personal causado por las acciones de su marido. Los hijos de la pareja también fueron afectados por la situación, enfrentando el escrutinio público y las dificultades familiares derivadas del escándalo. 

El caso de la infanta Cristina y Iñaki Urdangarin ha dejado una profunda huella en la monarquía española, socavando la confianza de los ciudadanos en las instituciones y poniendo de manifiesto la fragilidad de una institución que siempre ha buscado proyectar una imagen de perfección.