Juan Carlos I fue informado de las fiestas con excesos de Letizia en un piso de Madrid

Estos encuentros de Letizia presuntamente estaban marcados por el exceso.

La figura de Letizia Ortiz, actual reina consorte de España, vuelve a situarse en el centro de la controversia tras conocerse que el rey emérito, Juan Carlos I, habría estado informado de supuestos excesos y encuentros de la entonces periodista en varios puntos de Madrid y Barcelona antes de su enlace con el rey Felipe VI. Las revelaciones, provenientes de fuentes cercanas al entorno monárquico, aseguran que el monarca emérito tuvo acceso a detalles comprometidos sobre la vida privada de Letizia, lo que generó tensión en la Casa Real en los meses previos al compromiso oficial.

Según señalan estas fuentes, Juan Carlos I habría sido informado de las fiestas celebradas por Letizia Ortiz en un piso de Madrid, donde, presuntamente, se producían encuentros marcados por el exceso. Estas reuniones, que se llevaban a cabo con un grupo reducido de conocidos, habrían suscitado preocupación dentro de los círculos monárquicos, al considerar que no correspondían con la imagen de discreción y moderación que se espera de un miembro de la familia real.

Las investigaciones llevadas a cabo por personal cercano a Juan Carlos I revelaron que estos encuentros en Madrid no eran casos aislados, sino parte de una rutina que Letizia mantenía en determinados entornos privados. Una de las ubicaciones mencionadas de forma recurrente es un piso situado en la calle Miguel Ángel, en la capital madrileña, donde la consorte también habría coincidido con personas como Jaime del Burgo, personaje que señalado por su cercanía con la futura reina durante aquella etapa.

Las advertencias de Cristina y los encuentros de Letizia en Barcelona

No solo Juan Carlos I tuvo conocimiento de estos eventos. La infanta Cristina, hermana del rey Felipe VI, también habría advertido a su hermano sobre la doble vida de Letizia. Según señalan las informaciones, Cristina puso el foco en los supuestos encuentros que Letizia mantenía en la ciudad de Barcelona, donde se hospedaba en el Hotel Juan Carlos I para sus citas discretas.

En los altos círculos sociales de la época, los rumores sobre la vida privada de Letizia Ortiz comenzaron a ganar fuerza, generando dudas sobre su idoneidad como futura reina consorte. Estas especulaciones llegaron a oídos del rey emérito, quien, preocupado por las consecuencias que podrían acarrear para la institución, se encargó de recopilar información detallada y trasladársela a su hijo, el entonces príncipe Felipe.

Felipe VI perdonó a Letizia 

Los círculos cercanos a la Casa Real aseguran que las informaciones sobre la vida de Letizia Ortiz no fueron bien recibidas por Felipe VI, quien en ese momento estaba decidido a formalizar su relación con la periodista. A pesar de las advertencias de su padre, su hermana Cristina y los rumores que circulaban entre las élites madrileñas y barcelonesas, Felipe mantuvo su postura y avanzó con el compromiso, que finalmente se oficializó en 2003.

Desde entonces, la figura de Letizia ha estado marcada por un constante escrutinio público, y las especulaciones sobre su pasado continúan siendo un tema recurrente en ciertos sectores. La información que hoy sale a la luz no solo rememora los desafíos que enfrentó la pareja real en sus inicios, sino que también arroja luz sobre las tensiones internas que la llegada de Letizia Ortiz generó en la familia Borbón.