Juan Carlos I acordó no explicar que Letizia acudió a Valencia en 2005 para ser fecundada in vitro
Un capítulo privado de la vida de la reina que nunca se explicó públicamente
La reina Letizia ha vuelto a ser foco de polémica por aspectos muy íntimos de su vida. Recientemente, periodistas como Jaime del Burgo y Jaime Peñafiel han desvelado detalles sobre su matrimonio con Felipe VI y sobre la maternidad de sus hijas. Entre estos datos, sobresale uno muy sensible: según sus relatos, Letizia habría viajado a Valencia en enero de 2005 para someterse a un tratamiento de fecundación in vitro.
Peñafiel sostiene que la entonces princesa tenía dificultades para concebir. Por indicación médica, inició un tratamiento hormonal en la clínica IVI, conocida en Europa por sus procedimientos de reproducción asistida. La visita fue discreta. Letizia solo estuvo acompañada por personas de confianza, buscando privacidad y seguridad en un momento tan delicado.
El tratamiento, según los informes, se habría planificado cuidadosamente. El periodista incluso señala que la elección de Valencia no fue casual: el prestigio del centro y la discreción del lugar eran fundamentales. La historia de Letizia, de confirmarse, marcaría un precedente único en la monarquía europea.
La implicación de su hermana y el peso del silencio
Uno de los aspectos más impactantes de esta historia involucra a la hermana de la reina, Érika Ortiz. Peñafiel afirma que Letizia podría haber usado óvulos de Érika debido a complicaciones derivadas de abortos previos. La situación habría generado tensiones familiares profundas y un sentimiento de culpa devastador para Érika.
Trágicamente, Érika se quitó la vida en 2007, poco después del nacimiento de la princesa Leonor. Según los rumores, quería conocer a su “medio hija”, pero se lo impidieron para no revelar la verdad sobre el tratamiento. Letizia habría cargado con este dolor en silencio desde entonces, temerosa de que la información se filtrara.
Otros periodistas, como Joaquín Abad y Jaime del Burgo, coinciden en que los embarazos de Letizia fueron asistidos médicamente. También sugieren que la relación con Felipe VI ya estaba deteriorada antes de la concepción de sus hijas. El silencio de la Casa Real ha dejado que estos rumores circulen y crezcan, mientras los detalles sobre la fecundación in vitro de la heredera siguen siendo un misterio para el público.