Iñaki Urdangarin están viviendo con miedo en Vitoria

Ainhoa e Iñaki saben que están siendo vigilados por Casa Real

Si hay algo de lo que Iñaki Urdangarin sabe mucho, es de la forma que Zarzuela tiene a la hora de actuar contra aquellos que no gustan. En este sentido, desde el día en el que se divorció de la infanta Cristina y amenazó con contar toda la verdad que se esconde en la Casa Real, Iñaki Urdangarin pasó a ser el principal enemigo de Zarzuela. Felipe VI y el resto de los Borbón lo designaron como un riesgo para la estabilidad de la monarquía, por lo que se iniciaron los trabajos para hacerle la vida lo más complicada posible al que fuera Duque de Palma.

Consciente de que su persona es algo que no gusta nada en Zarzuela, Iñaki Urdangarin vive obsesionado con el hecho de que lo están espiando a todas horas. Tanto él como Ainhoa Armentia viven poniendo mucha atención a todo lo que pasa a su alrededor y aquellas personas que están cerca. Saben que no pueden dar ni un solo paso en falso, ya que Casa Real lo aprovecharía de cualquier manera posible.

Urdangarin y Ainhoa evitan salir de casa

Hasta tal punto ha llegado el miedo que tienen Iñaki Urdangarin y su pareja, que salen de casa lo mínimo posible. No quieren que nadie les saque fotos ni tenga información confidencial sobre su vida. Por este motivo también tratan de ser lo más discretos posible y no hacer ruido cuando hacen algo especial. Sin embargo, esto ya ha provocado más de una pelea interna. Y es que para Ainhoa Armentia esto no es calidad de vida.

Millonarios, pero a un coste demasiado alto

La realidad es que Iñaki y Ainhoa se han hecho millonarios gracias al dinero que les llega de parte de los Borbón. Más de 25.000 euros al mes es una cantidad de dinero con la que viven como reyes. Sin embargo, no pueden aprovechar la mayoría de esto por su miedo a que los vean haciendo algo que pueda ir en su contra.

Así pues, tanto Iñaki Urdangarin como Ainhoa Armentia viven con mucho miedo en Vitoria, donde están convencidos de que hay espías enviados por parte de la Casa Real para tenerlos bien controlados.