Guillermo de Gales compró una mansión para tener encuentros secretos a espaldas de Kate Middleton
El Príncipe Guillermo se ha acostumbrado a recibir a escondidas, a sus amantes
Desde hace ya varios años, el matrimonio entre Kate Middleton y Guillermo de Gales no funciona tan bien como hubieran esperado cuando, en 2011 se dieron el sí quiero. En este sentido, la vida marital de los Príncipes de Gales se ha acabado convirtiendo, con el paso del tiempo, en una relación llena de peleas, engaños e infidelidades. Una situación que se ha ido incrementando, dando lugar a que Guillermo acabara tomando la decisión de usar una de sus mansiones únicamente para sus encuentros secretos con otras mujeres.
Ante esta situación, fuentes cercanas a la Realeza de Gran Bretaña, aseguran que Guillermo de Gales llegó a usar una mansión, cuya ubicación es totalmente desconocida, para mantener, durante años, encuentros secretos con sus amantes. Unos encuentros que habría tenido a espaldas de Kate Middleton y de todos los miembros de la Casa Real, quienes, a pesar de saber de las malas costumbres del Príncipe de Gales, no sabía ni cuando ni donde tenía esos encuentros extramatrimoniales.
Guillermo lleva muchos años engañando a Kate
La realidad es que, tal y como han desvelado desde Gran Bretaña, a pesar de no haberse hecho público, por parte del propio Príncipe, se sabe que Guillermo ha sido infiel a Kate Middleton durante muchos años y con muchas mujeres. El Príncipe de Gran Bretaña siempre ha destacado por su gusto por las mujeres y, a pesar de su matrimonio, nunca llegó a contener su deseo de pasar noches enteras junto a sus amantes. Lo que, junto al miedo a ser descubierto, lo llevó a usar una mansión como punto secreto para sus encuentros.
Una costumbre, la de Guillermo que ha acabado hiriendo de muerte a su matrimonio con una Kate Middleton que, por interés y para evitar problemas, no ha querido divorciarse del que todavía es su marido. Pues, lleva años harta de aguantar engaños por parte de Guillermo de Gales.
Carlos III, avergonzado de su hijo
Por otro lado, Carlos III está realmente preocupado por esta tendencia de Guillermo de Gales, el cual podría acabar siendo un Rey demasiado afectado por sus malas costumbres, algo que podría generar grandes problemas en el seno de la Realeza, donde, a pesar de que las infidelidades sean algo habitual, siguen siendo un tema que nadie se atreve a tocar de forma pública.
Así pues, Guillermo de Gales, para evitar miradas indiscretas y cualquier tipo de juicio público, usó una mansión privada para tener encuentros extramatrimoniales con sus amantes.