Froilán desafía a Felipe VI y desencadena un terremoto en Zarzuela

Al igual que Juan Carlos I, Froilán se ha hartado de Abu Dabi

Cuando llegó al trono de Zarzuela, Felipe VI encontró en la expulsión de Froilán y de Juan Carlos I, la mejor solución al problema que ambos suponían para la estabilidad de la Casa Real. Y es que no había una sola semana en la que el hijo de la infanta Elena o Don Juan Carlos no fueran protagonistas de alguna información controvertida que ponía en entredicho la imagen y la reputación de Casa Real. Por lo que Felipe VI llegó a la conclusión era que lo mejor era prescindir de ambos y enviarlas a vivir a Abu Dabi. Una decisión que no gustó a ninguno de los dos.

En este sentido, mientras que Juan Carlos I siente que se está muriendo en los Emiratos Árabes, Froilán siente que está perdiendo el tiempo ahí. Se siente solo y lejos de todas las personas con las que es feliz. Por lo que, ya ha pedido en reiteradas ocasiones, que Felipe VI le permita demostrar que ha cambiado y que es una persona de valor para Casa Real. Algo que todavía no ha pasado.

Froilán y Jaime de Marichalar se han hartado de la autoridad de Felipe VI

Ante las constantes negativas por parte del Rey de España, Froilán ha comenzado a buscar apoyos y ha encontrado el de su padre. Un Jaime de Marichalar que coincide con su hijo en que lo mejor que puede hacer es volver a España y encontrar un trabajo que le permita desarrollarse profesionalmente. Algo que no puede hacer en Abu Dabi.

De este modo, según revelan fuentes cercanas a Zarzuela, Froilán ha tomado, de forma unilateral, la decisión de que este va a ser su último verano en Abu Dabi. Ya no quiere pasar más tiempo lejos de casa y ha marcado estos próximos tres meses como el plazo límite para que Felipe VI lo readmita en España. Si no asegura que se verá obligado a vulnerar la autoridad de su tío para volver a vivir en España.

Así pues, Froilán y su necesidad de volver a su país han abierto un conflicto muy importante en Zarzuela, donde Felipe VI deberá decidir si lo mejor es ponerse duro con su sobrino o tratar de acercar posturas y suavizar la situación.