Felipe VI y Letizia, el viaje a Valencia termina mal

El viaje de los reyes Felipe VI y Letizia a Valencia, que en principio estaba programado como un acto oficial de rutina, ha terminado dejando al descubierto tensiones en el matrimonio real. Según fuentes cercanas a Zarzuela, la discrepancia principal habría surgido en torno a la participación de la princesa Leonor en el evento. Letizia, siempre preocupada por destacar la presencia de su hija mayor en compromisos institucionales, habría insistido en que Leonor los acompañara, mientras que el rey no consideró conveniente su asistencia en esta ocasión.

Letizia veía en el acto de Valencia una oportunidad perfecta para que Leonor continuara reforzando su imagen como futura reina, especialmente después de la gran repercusión que tuvo su reciente juramento de la Constitución al cumplir los 18 años. Sin embargo, Felipe VI, en un movimiento inesperado, habría rechazado la idea, argumentando que el evento no tenía la relevancia suficiente para involucrar a la princesa de Asturias, quien actualmente está centrada en sus estudios en la Academia Militar de Zaragoza.

Este desacuerdo habría escalado en días previos al viaje, generando discusiones airadas entre los monarcas. Según fuentes, Letizia habría señalado que cada vez es más importante visibilizar a Leonor en actos públicos, mientras que Felipe VI sostenía que la exposición de su hija debe ser medida y limitada a eventos de alto impacto.

El viaje a Valencia de los reyes estuvo envuelto en tensiones y rumores

El viaje de los reyes a Valencia, aunque transcurrió con varios incidentes, habría estado marcado por una tensión palpable entre ambos. Durante las intervenciones oficiales, Letizia se mostró distante en algunos momentos, lo que no pasó desapercibido para la prensa local. Aunque las sonrisas de rigor estuvieron presentes, la química entre los monarcas parecía más fría de lo habitual, alimentando los rumores sobre un distanciamiento temporal.

En privado, el desacuerdo sobre la presencia de Leonor no solo habría exacerbado las diferencias entre Letizia y Felipe, sino que también habría evidenciado posturas contrapuestas sobre el papel que la princesa debe desempeñar en los próximos años. Mientras la consorte apuesta por una presencia más activa y continuada de Leonor en la agenda oficial, el rey prefiere protegerla de la presión mediática y darle espacio para crecer en un entorno más controlado.

Letizia quiere mostrar más a Leonor publicamente pero Felipe VI se lo niega 

Las discusiones sobre el papel de Leonor en la vida pública no son nuevas dentro de la Casa Real, pero este episodio podría reflejar un desacuerdo más amplio sobre cómo Felipe VI y Letizia perciben la formación de su hija como futura reina. Para la reina, con una sensibilidad particular hacia la opinión pública y el impacto mediático, cada oportunidad es crucial para consolidar la imagen de Leonor. Para Felipe, en cambio, la prioridad parece ser preservar la tranquilidad de su hija y evitar un desgaste prematuro.

A medida que la princesa de Asturias asume más responsabilidades, es probable que estas diferencias entre Felipe y Letizia se conviertan en un tema recurrente dentro del seno de la familia real. Por ahora, el viaje a Valencia deja un eco de tensión que, aunque disimulado en público, podría marcar un punto de inflexión en cómo los reyes gestionan su papel como padres y monarcas.