Felipe VI interrumpió el tercer embarazo Letizia después del nacimiento de Leonor y Sofía
El entonces príncipe apostaba por esta relación, pero realmente lo que vivía era una gran mentira.
Felipe VI y la reina Letizia vivían una vida llena de responsabilidades y compromisos reales. A pesar de tener dos hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía en el corazón del rey, había un deseo latente que fue imposible: tener un tercer hijo.
¿Qué ocurrió con el deseo de Felipe VI de ser padre por tercera vez?
Felipe VI siempre había soñado con una familia numerosa. Aunque estaba inmensamente orgulloso de sus dos hijas, sentía que un tercer hijo completaría su felicidad y estuvo cerca de tenerlo. Sin embargo, todo su sueño se vio frustrado por la supuesta infidelidad de su mujer con Jaime del Burgo.
Según fuentes cercanas a la familia real, a pesar de continuar con su relación con Felipe, la consorte también seguía viéndose con Jaime del Burgo, incluso estando embarazada de Leonor y Sofía.
Se dice que el entonces príncipe apostaba por esta relación, pero realmente lo que vivía era una gran mentira. Presuntamente no fue hasta 2012 que comenzó a sospechar de su esposa, y el Centro Nacional de Inteligencia la investigó y confirmó lo que tanto temía. En aquel momento se descubrió su relación con el abogado, pero mantuvieron el matrimonio porque la Casa Real quiso impedir el escándalo.
Algunos informantes aseguran que la Reina estaba embarazada, pero al estar envuelta esta red de mentira e infidelidad el hijo de Juan Carlos I decidió frenar este tercer embarazo de la consorte.
Al descubrir la infidelidad y el intento de fuga de Letizia, Felipe decidió no tener más hijos con ella. De hecho, en ese momento, perdió toda confianza en su relación al punto de dejar de compartir la misma cama y mantener relaciones íntimas. A partir de entonces, se dice que ocurrió el famoso cese de convivencia, aunque nunca se ha hecho público, ya que sería un escándalo.
Las historia de amor que se desmoronó por la infidelidad
Felipe y Letizia se conocieron en 2002 y rápidamente se enamoraron. Su relación fue un soplo de aire fresco para la monarquía española, y su boda en 2004 fue un evento que captó la atención de todo el país. Juntos, tuvieron dos hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, y formaron una familia que parecía perfecta a los ojos del público.
Las diferencias en sus personalidades y enfoques comenzaron a generar tensiones. Letizia, acostumbrada a la vida pública pero también a la independencia, a veces se sentía atrapada por las restricciones de la vida real. Felipe, comprometido con su papel como monarca, a menudo se encontraba en medio de las expectativas de la corona y las necesidades de su familia.
El amor que en principio los unió parece haberse ido fragmentando hasta llegar al punto en que Letizia buscó pasión en los brazos de otro (Jaime del Burgo), rompiendo el corazón del rey Felipe, exterminando la idea de tener un tercer hijo en su familia y cargándose por completo su matrimonio (de puertas para adentro). En la actualidad ambos mantienen las apariencias como pareja casi perfecta para evitar escándalos en la corona.