Casa Real pidió informes para seleccionar a las amigas de Leonor
Letizia y Felipe quieren la mejor compañía para sus hijas.
La Casa Real ha sido objeto de nuevas especulaciones tras desvelarse que presuntamente, al igual que ocurrió durante su estancia en la Academia General Militar de Zaragoza, Zarzuela ha participado activamente en la selección de las compañeras de cuarto de la Princesa Leonor en la Escuela Naval Militar de Marín. Esta práctica, que se remonta a los años de la Princesa en el UWC Atlantic College de Gales, ha generado un intenso debate público sobre los límites entre la protección institucional y una posible intromisión en la vida privada de las jóvenes princesas.
Según fuentes cercanas a la Casa Real, la selección de las compañeras de cuarto se basa en criterios como la compatibilidad de caracteres, el rendimiento académico y la ausencia de antecedentes conflictivos. El objetivo, aseguran, es garantizar un entorno seguro y propicio para el desarrollo personal y académico de las jóvenes herederas.
Esta práctica ha sido aplaudida por aquellos que ven en ella una medida necesaria para proteger a las jóvenes princesas de las presiones mediáticas y de posibles influencias negativas. Sin embargo, hay quienes argumentan que se trata de un control excesivo por parte de Letizia que limita la libertad de sus hijas y podría afectar negativamente a su desarrollo social.
Letizia es muy controladora con Leonor y Sofía
La Reina Letizia ha sido señalada como la principal impulsora de esta estrategia. Su preocupación por la imagen pública de la familia real y su deseo de controlar todos los aspectos de la vida de sus hijas han sido objeto de numerosas críticas.
Sin embargo, según algunos informantes, aunque la consorte pueda ser controladora, la Casa Real ha llevado esta práctica en el pasado con otros miembros de la corona española que tiene como objetivo garantizar la continuidad de la institución monárquica, intentando no manchar la reputación de sus integrantes, y por supuesto del heredero al trono.
Una realidad detrás de las cortinas
Leonor y Sofía, las hijas de los Reyes de España, han crecido bajo el escrutinio público y bajo las rígidas normas de la Casa Real. A pesar de la imagen idílica que se proyecta de la familia real, numerosas fuentes y expertos han señalado que la infancia de estas jóvenes princesas ha estado lejos de ser la de cualquier adolescente de su edad.
Desde su nacimiento, ambas han vivido en un entorno altamente controlado. Cada aspecto de sus vidas, desde su educación hasta sus actividades de ocio, ha sido cuidadosamente planificado y supervisado. La Casa Real ha establecido un protocolo estricto que rige su día a día, limitando su libertad de elección y su interacción con el mundo exterior.
Lo cierto es que, la infancia de Leonor y Sofía ha sido marcada por una serie de circunstancias únicas que las distinguen de la mayoría de los adolescentes. Si bien han tenido acceso a privilegios y oportunidades que muchos no tienen, también han enfrentado desafíos y limitaciones que podrían afectar su desarrollo personal, sobre todo para la Princesa de Asturias que tiene una gran responsabilidad sobre sus hombros.