Casa Real le pasa una factura a la infanta Elena cada final de mes

Los altos costos de la hípica: la infanta Elena recibe facturas mensuales por sus caballos

La infanta Elena, hermana mayor del rey Felipe VI, no vive en el Palacio de la Zarzuela, pero su presencia sigue latente en sus instalaciones. Desde su separación de Jaime de Marichalar, Elena reside en un lujoso apartamento en el barrio madrileño de Niño Jesús, valorado en unos 2,5 millones de euros y obsequiado por su padre, el rey emérito Juan Carlos I. Aunque su residencia de 500 metros cuadrados es espaciosa y cómoda, no tiene el espacio necesario para albergar a sus amados caballos, lo que la ha llevado a buscar una solución en las caballerizas de Zarzuela.

Sin embargo, este espacio en el recinto real no viene sin un costo. La Casa Real le envía cada mes una factura a la madre de Froilán y Victoria Federica para cubrir los gastos de mantenimiento de sus siete equinos. Estos costos, aunque reducidos en comparación con las cuotas de otros clubes de prestigio, representan una carga considerable que Elena ha asumido para mantener viva su pasión por la hípica y la cría de caballos.

La pasión ecuestre de la infanta Elena y sus caballos estrella

La infanta Elena posee hasta siete caballos: Escale du Castel, Ema, Goyesca, Mia, Jordano, Greco y Qant. Este último, su corcel estrella, es con el que compite actualmente y ha cosechado múltiples éxitos en el mundo de la hípica. Los otros equinos forman parte de su yeguada personal, que ahora combina entre competiciones y cría. Lejos de abandonar su afición ecuestre, la infanta ha decidido mantener a sus caballos y dedicarse a su crianza, aunque esto implique recibir facturas mensuales por su manutención.

Fuentes cercanas indican que la infanta Elena no solo se dedica a las competiciones ecuestres, sino que también está profundamente involucrada en la crianza de sus caballos, algunos de los cuales llevan sus iniciales como símbolo de orgullo. Por esta razón, Elena de Borbón se ocupa de sus animales con esmero y recibe informes semanales detallados sobre su bienestar, a pesar de que esto conlleva altos gastos en veterinarios, alimentación y el salario del cuidador que los atiende diariamente.

Un mantenimiento que cuesta miles de euros al mes

La situación financiera para mantener a estos caballos no es simple. Según se ha informado, el caballo estrella, Qant, reside en el exclusivo Club de Campo de Madrid, donde los gastos de manutención alcanzan cifras elevadas. La infanta debe cubrir una media de 800 euros mensuales para el box del caballo, además de una fianza inicial de 2.500 euros solo para poder montarlo allí. A esto se suman los costos adicionales de alimentación, herrador, veterinario y un entrenador para mantener el nivel de competencia de Qant.

El resto de sus equinos, sin embargo, se encuentran en las instalaciones de Zarzuela, donde su padre, Juan Carlos I, construyó una pista ecuestre y habilitó boxes especialmente para ella. Aunque los costos en Zarzuela son menores que en el Club de Campo, la infanta debe cubrir igualmente el costo del mozo, la alimentación y las atenciones médicas. Se ha rumoreado que, en un esfuerzo por reducir gastos, la infanta Elena ha comenzado a compartir transporte para el traslado de sus caballos, una medida que busca aliviar el impacto financiero que supone esta pasión.