Carlos III ha prohibido al Príncipe Guillermo que siga siendo infiel a Kate Middleton, una vez sea Rey

El Rey Carlos III tiene serias preocupaciones por el gusto de Guillermo por las mujeres

Si hay algo que ha caracterizado el matrimonio entre Kate Middleton y Guillermo, son las constantes infidelidades por parte del Príncipe de Gales, que, durante muchos años ha dado nula importancia al hecho de guardar fidelidad a la que es su esposa. Una situación que preocupa mucho a Carlos III, que no considera que la costumbre de su hijo, de mantener relaciones extramatrimoniales con otras mujeres, vaya a ser una buena forma de mantener la imagen pública de la Casa Real.

Ante esta situación, podríamos estar ante los últimos tiempos de la vida extramatrimonial de Guillermo de Gales, pues, según confirmaron fuentes cercanas a la Casa Real, Carlos III ya ha advertido a su hijo que, una vez llegue al trono de Gran Bretaña, será fundamental que mantenga un carácter mucho más serio y deberá mantenerse muy lejos de cualquier escándalo sobre una posible infidelidad, pues su prioridad siempre debe ser el mantenimiento de la imagen pública y de solidez.

Un cambio que Kate Middleton va a agradecer

En este sentido, la prohibición por parte de Carlos III, a las relaciones extramatrimoniales de Guillermo de Gales, no será solamente una garantía de seguridad para la Casa Real, sino que también será una mejora en la calidad de vida de una Kate Middleton que, pese a permitir todo lo que ha hecho Guillermo, seguro que estará más a gusto al saber que su marido ha dejado atrás su costumbre de verse con sus amantes.

Y es que, a pesar de que el propio Carlos tuvo un comportamiento más que reprochable en algunos años de su vida, se ha esforzado para evitar escándalos durante su etapa como Rey de Gran Bretaña, donde ha minimizado ese tipo de problemas para dotar de tranquilidad a una Realeza que ya ha vivido demasiados dolores de cabeza a lo largo de los últimos años. Especialmente, desde que Isabel II falleció.

Carlos arrastra dudas sobre su hijo

A pesar de que Guillermo ya tiene 42 años y es un hombre completamente formado para ser, algún día, Rey de Gran Bretaña, Carlos III todavía tiene serias dudas sobre si su hijo está realmente listo para asumir una responsabilidad tan grande como lo es el hecho de ser Rey.

Así pues, para asegurarse de que no destruye la imagen de la Realeza británica, Carlos III ha prohibido a su hijo Guillermo, la posibilidad de mantener sus relaciones extramatrimoniales, una costumbre que deberá dejar por el bien de los Windsor.