Luis Enrique y Ancelotti, mismo problema o bendición: ¡vaya crack!
España y el Real Madrid tratan de tomar una decisión con una prometedora posibilidad
Esta temporada es muy especial, diferente, atípica. Los petrodólares han conseguido, nos in polémica, cambiar los ritmos universales del fútbol y meter en mitad de temporada todo un Mundial, en Qatar, que va a formalizar una campaña de contrastes, quien salga bien de la primera etapa no tiene nada asegurado con la segunda. Sobre ello, hay jugadores que no van a detener su actividad y uno concretamente es un problema para Luis Enrique y Carlo Ancelotti. O una bendición.
Sí, efectivamente miramos a San Siro para señalar a Brahim Díaz, jugador del Real Madrid cedido por el club blanco durante dos temporadas a Milán, pero cuyo préstamo acabará en junio de la presente temporada. El ex del Manchester City luce el 10 a la espalda de la entidad rossoneri, allí, en Milán es profeta y este fin de semana viene de hacer un golazo, ante la Juventus de Turín, que vuelve a situar el debate sobre Luis Enrique y Carletto.
Tengan en cuenta que las sorpresas en la convocatoria de España, sin haber mucho margen, aún pueden darse y un futbolista encarador, que puede jugar de enganche, por ambas bandas y por centro, con gran verticalidad como Díaz puede venirle bien al conjunto español. De la misma manera, el Madrid mira muy de cerca sus avances ya que Díaz tendrá que personarse en la pretemporada del equipo en la campaña 23/24.
Él, Brahim, ha sido preguntado por este más que probable paso que deberá de dar y ha sido taxativo: no quiere ni oír hablar de regresar al Real Madrid, está feliz en Milán y en la Serie A. No es para menos, en el campeón de Europa no tiene hueco, máxime con el gran momento de Rodrygo Goes y Vinicius, y tendría que empezar de nuevo de cero ganándose un lugar en el once, uno que no tiene asegurado. También complicada es su presencia en Qatar, aunque si se habla de su opción es porque aún puede haber lesionados y de los jugadores disponibles es uno de los que más da el perfil: juega en las categorías inferiores de La Roja, es joven y tiene cualidades que pueden venirle bien a España.