Fuga de un amigo de Messi a Italia: otro culé que se marcha
El jugador está muy cerca de cerrar su acuerdo
Poco a poco va quedando menos de aquél FC Barcelona de Pep Guardiola que maravilló al mundo con su fútbol, su estilo y su capacidad enorme de ganar partidos y trofeos desde una estética preciosista. Algunos miembros de ese equipo, como Samuel Eto’o, Thierry Henry o Carles Puyol ya se han retirado, otros, como Leo Messi, Gerard Piqué o Sergio Busquets siguen en activo y en Can Barça. Y también los hay que se buscan la vida fuera de la capital catalana, como este amigo de Leo Messi que se marchará en los próximos días a la Serie A.
Pedro y el mismo Busquets son el paradigma del fútbol guardioliano. El técnico de Sampedor les rescató del filial para hacer de ellos, en una misma temporada, jugadores utilísimos y rentables, que participaron activamente en aquél legendario sextete. Tanto que ambos jugadores también fueron piezas clave en la España campeona de la Copa del Mundo en Sudáfrica y de Europa, dos años después.
Pues bien, en el caso de Pedro ya cumple sus últimas bocanadas como futbolista y siempre ha rentado su rendimiento. En el Chelsea ha sido un jugador importante desde que llegó a Inglaterra. Su aportación y capacidad de desborde y asociación, así como su polivalencia, le dejan todavía un puesto de privilegio para este mercado de fichajes. De hecho el jugador canario, amigo de Messi, está cerca de unirse a Carles Pérez en la Roma.
El canterano fue el inexplicable regalo de la cantera a un equipo foráneo de un Barça que luego gastó dinero en Martin Braithwaite ante las lesiones de Ousmane Dembelé y Luis Suárez. El joven jugador nunca lo ha entendido y se ha aficionado a soltar sapos y culebras siempre que ha podido acerca de la actual gestión de la junta directiva. Y ahora es otro futbolista azulgrana, el llamado en su día Pedrito, el que pone rumbo a la ciudad eterna. Precisamente la actual política de súper fichajes, en este caso de Rossell con Neymar Júnior, fue el motivo de la marcha de Pedro. Ahora ninguno de los dos atacantes izquierdos está en la Ciudad Condal. Seguro que el astro argentino tiene añoranza de aquellos tiempos.