¡Divorcio total! El FC Barcelona despide a este jugador
Su futuro estaba fuera de España desde hace meses
Tenía que pasar y pasó. Ruptura total entre el FC Barcelona y el futbolista chileno Arturo Vidal. El centrocampista sudamericano tiene una importante oferta del Inter de Milán y, tras la carta de libertad que le ha puesto sobre la mesa el club blaugrana, viajará a Italia para ponerse a las órdenes de Antonio Conte lo antes posible.
Josep María Bartomeu, presidente del club, lleva tiempo queriendo deshacerse de Vidal, ya que su rendimiento en el campo no ha sido el esperado y sus problemas extradeportivos dejaban la imagen de la entidad por los suelos. Un mal de amores que comenzó como una petición expresa de Ernesto Valverde en el año 2018 y que ha terminado con unas controversias irreparables entre ambos lados.
Pese a que el último año, en lo deportivo e institucional, el FC Barcelona estado inmerso en una debacle, es cierto que Arturo Vidal siempre ha dado la cara por el equipo y se ha dejado todo en el campo. No obstante, las últimas declaraciones que realizó el jugador en las que aseguraba que el Barça tenía que “cambiar de estilo” si quería aspirar a títulos no han sentado nada bien la cúpula del club, que le ha transmitido en la mañana de este jueves que tiene libertad para abandonar el club y, cuanto antes, mejor.
El chileno tiene ya 33 años a sus espaldas, pero la ilusión y fiereza con la que salta el campo bien parece la de un chaval que acaba de debutar. A las órdenes del técnico italiano en Milán, Vidal puede ganarse el sitio en uno de los mejores equipos del país. Un país que ya conoce por su pasado bianconero en el que dejó muy buenas sensaciones antes de marcharse a Alemania para militar en las filas del Bayern de Múnich.
El guerrero chileno firmará por dos años con la entidad de la Lombardía e intentará ser una de las claves que permitan al equipo luchar por el Scudetto la temporada que está a punto de empezar y, de esta forma, acabar con la hegemonía de la Juventus de Turín. Con esta situación, el Barça se quita un problema, pero le surge otro, y es que necesita reforzar esa posición que, tras la marcha de Ivan Rakitic y el propio jugador chileno, se ha quedado en ascuas.