Ahora negocia con Pirlo: la traición más fea que Zidane ha vivido

Cambia al Real Madrid por la Juventus

Eduardo Camavinga era noticia hace pocos días, pues se hablaba acerca de su posible renovación con el Stade Rennais. Un jarro de agua fría para el Real Madrid, que le tiene entre sus objetivos prioritarios, y que estaba dispuesto a hacer una apuesta importante por él de cara al próximo mercado estival. Porque ya se hablaba sobre una oferta de 55 millones de euros por este centrocampista de 18 años, ya afianzado en la élite desde hace tiempo.

Zinedine Zidane es su gran valedor, y le quiere como sea, pues ve en él a un magnífico relevo para Casemiro, un perfil del que no disponen actualmente. Sin embargo, se llevaron una sorpresa al ver sus declaraciones en la concentración de la selección francesa, afirmando que sus planes a corto plazo pasaban por estirar su actual vínculo. Aún no se veía preparado para dejar su país natal, e iniciar una aventura lejos de su zona de confort.

O eso es lo que aseguraba y justificaba para explicar sus calabazas a Florentino Pérez. Pero la realidad, como ha podido conocer Don Balón de manera exclusiva, es bien distinta, y esconde una traición. Y es que los planes del internacional galo siguen siendo los mismos: salir de la débil Ligue 1, y marcharse a un equipo ‘top’, donde pueda competir por títulos y cobrar un salario más elevado. Dos cosas que le ofrece la Juventus de Turín.

¿Y porque a la ‘Vecchia Signora’ y no al Madrid? Es la pregunta que se hacen muchos, y que tiene una respuesta bastante simple. En el Allianz Stadium le prometen algo que en el Santiago Bernabéu no pueden hacer, y es jugar con continuidad y tener un papel clave, como titular indiscutible. Camavinga necesita jugar y seguir creciendo, para lo que necesita confianza y tener muchos minutos. Y de ahí su elección por la Serie A, para ser entrenado por Andrea Pirlo, y compartir vestuario con Cristiano Ronaldo, si es que siguen el año que viene.

‘Zizou’ tratará de impedir como sea que esto suceda, pero parece bastante complicado, a decir verdad.

Veremos como evolucionan las cosas.