¡Tsunami anti-democrático! ¡No puede ser! Es oficial: ¡se suspende!

Nadie puede creer que este sucediendo esto en España

Hay mucha polémica y muchos nervios en Barcelona. El Clásico pende de un hilo. El partido entre Fútbol Club Barcelona y Real Madrid ya se tuvo que aplazar por la convulsa situación en Barcelona. Ahora de nuevo los “demócratas” amenazan con que el encuentro no se dispute. Y de no hacerlo estaríamos ante la opción de que la Federación le de los 3 puntos al Madrid. Cabe esa posibilidad, aunque sea remota.

El Barcelona sabe que no puede permitirse que el encuentro no se dispute. Pero la Federación ya le dejó claro que la seguridad no dependía de ellos. Debía ser el club con la ayuda del ayuntamiento quien garantizara la posibilidad de jugar el encuentro.

Para ello se han puesto manos a la obra. Habrá más de 3.000 efectivos de los Mossos De Escuadra que intentarán que todo vaya con normalidad. El “Tsunami Democratic” ya ha dicho que su intención no es suspender el partido si no aprovechar el evento para tener más visibilidad. Falta por ver si es cierto lo que dicen o si realmente quieren aprovechar el partido para continuar su campaña. En el Barcelona existe el temor de que haya una invasión del campo y que el partido tenga que suspenderse.

Algo que sucedió ayer en la Segunda División. Sirve como aviso y precedente al Barcelona lo ocurrido ayer en Vallecas. Un sector de la grada se dedicó gran parte del encuentro a llamar nazi a un jugador del Albacete. El ucraniano Roman Zozulia.

El ex del Betis pudo jugar en Vallecas hace dos temporadas. Pero su pasado como parte de las milicias ucranianas se lo impidió. Le acusaron de ser un fascista y el sector más radical de la grada, Los Bukaneros, se opusieron frontalmente a su contratación.

Ayer tras una primera parte llena de cánticos el Albacete deicidio no salir a jugar en la segunda parte. El Rayo le apoyó y el arbitro suspendió el partido. Se va a reanudar, a priori hoy, a puerta cerrada.

El Barcelona ya tiene un aviso. El miércoles no puede fallar nada. Ni la democracia.