Xabi Alonso tiene un problema grave con Rüdiger

El técnico tolosarra no acaba de confiar en el defensa alemán

Xabi Alonso tiene un problema grave con Rüdiger Xabi Alonso tiene un problema grave con Rüdiger

El Mundial de Clubes ha confirmado algunas dudas que tenía Xabi Alonso desde que llegó al banquillo del Real Madrid, especialmente con algunos jugadores que tenía en el punto de mira. Uno de ellos es Antonio Rüdiger, teniendo en cuenta que el central volvía de lesión y era posible que no estuviera a su mejor nivel, como se demostró durante la competición, especialmente en el último partido.

El tolosarra tiene un problema con el alemán, ya que no acaba de confiar en él y es probable que tenga que ser uno de los titulares en la zaga por el pésimo rendimiento de otros defensas. Dean Huijsen será un fijo en las alineaciones del técnico por el gran nivel demostrado, mientras que Rüdiger debería ser quien lo acompañara si Éder Militão aún no está al 100%, aunque ya volvió a jugar.

Xabi Alonso no confía demasiado en Antonio Rüdiger

Aun así, el central acaba contrato en 2026 y, de momento, el Madrid no ha pensado en su renovación. Más que nada, porque quiere rejuvenecer la plantilla y, especialmente, la retaguardia. Los blancos tienen entre ceja y ceja el fichaje de Ibrahima Konaté, del Liverpool, pero el francés solo podría llegar al Santiago Bernabéu en caso de que alguien como Rüdiger abandonara el club.

El alemán no tiene intención de hacerlo y cumplirá al menos todo su contrato, a la espera de saber si el Madrid le ofrecerá o no una renovación. Si no es así, el defensa se irá el año que viene como agente libre tras unos años en el conjunto madrileño donde ha sido el líder de la retaguardia, pero que también ha estado cuestionado por su personalidad y actitud tóxica.

El central ha sido cuestionado por su actitud tóxica

De hecho, algunos compañeros se han acabado quejando de su comportamiento, tanto en los entrenamientos como en el terreno de juego durante los encuentros. Incluso ha tenido roces y peleas en los entrenos donde ha tenido que ser separado por varios integrantes de la plantilla, especialmente cuando ha hecho alguna entrada fuerte a otro jugador y este se ha rebotado en su contra, como pasó con Jude Bellingham en su día.