Rodrygo está viviendo situaciones de incomodidad con Mbappé en el vestuario del Real Madrid

Crecen los problemas en el vestuario del Real Madrid con Rodrygo como uno de los grandes perjudicados

La llegada de Kylian Mbappé al Real Madrid no ha sido la guinda del pastel que muchos esperaban, ni mucho menos. En un vestuario con muchos egos, la entrada de una estrella del calibre del francés, lo ha removido todo, con varios jugadores afectados. Y uno de ellos es Rodrygo, que está viviendo uno de sus peores momentos desde que aterrizó en el Santiago Bernabéu.

El brasileño ya detectó que algo no iba bien en diciembre, cuando vio como le quitaban de las fotos de portada de la consecución de la Supercopa de Europa, contra el Atalanta. En las fotos aparecía junto a Mbappé, Vinícius y Bellingham, pero se decidió que tocaba promocionar el nuevo tridente mágico, dejando de lado a Rodrygo.

Rodrygo, perjudicado por la lucha de clanes del Real Madrid

Y ahora, pasados los meses, Rodrygo está sufriendo la lucha de clanes que se ha formado en el vestuario del Real Madrid. Por un lado, está el grupo francés, liderado por Mbappé, y con jugadores del nivel de Tchouaméni, Camavinga y Mendy, a los que se añaden otros futbolistas. Por otro lado, está el grupo liderado por Vinícius, con Endrick, Militao y Bellingham como cabezas visibles.

Rodrygo es amigo de Vinícius, pero no quiere mala relación con los otros jugadores, que aún y así le están dejando de lado sin motivos aparentes. Esta situación molesta a Rodrygo, que no está nada cómodo en un ambiente cada vez más irrespirable.

Ataques del entorno de Mbappé a Rodrygo por su mal partido en San Mamés

A todo ello se añade que desde el entorno de Mbappé se está acusando a Rodrygo de tapar su mal momento de forma con la crisis que está viviendo el francés. Mbappé no jugó bien en Bilbao y falló un penalti, pero intentó muchas más cosas y entró mucho más en juego que un Rodrygo que pasó totalmente desapercibido.

Desde el entorno de Mbappé no entienden que todas las críticas se estén centrando en el 9 madridista cuando Rodrygo, que exige un trato de estrella, no hizo absolutamente nada durante el partido, siendo perjudicial para todo el equipo, incluido el propio Mbappé.