Mbappé desencadena un problema en plenas vacaciones que agita el vestuario del Real Madrid

Kylian Mbappé aterrizó el pasado verano en el Real Madrid como uno de los mejores jugadores del mundo y, por eso, Florentino Pérez lo bañó de oro, colocándose como el mejor pagado de toda la plantilla, por encima de otras estrellas que ya estaban en el equipo como Jude Bellingham o Vinicius. Precisamente, eso ha acabado trayendo problemas dentro del conjunto blanco.

El futuro del brasileño es uno de los aspectos que el Madrid tiene marcado en rojo, ya que las negociaciones para su renovación no están yendo nada bien. Vinicius ha dejado claro que quiere cobrar el mismo sueldo que Mbappé o incluso más, algo que el francés no acepta porque quiere mantener su estatus, lo que ha provocado un problema en plenas vacaciones que ha agitado el vestuario.

Vinicius quiere cobrar el mismo sueldo que Mbappé

El extremo ha dejado claro a los dirigentes blancos que se tiene que arreglar esta gran diferencia que hay entre los sueldos de dos de las estrellas del equipo, ya que, actualmente, Vinicius se encuentra en un escalón muy por debajo de Mbappé económicamente hablando. El salario del francés está a la orden del día, ya que llegó el año pasado, mientras que el del brasileño no.

Por eso, sus representantes llevan tiempo apretando a Florentino Pérez, pero de momento, el presidente no quiere darle la misma cantidad a otro jugador, y menos aún a Vinicius, un futbolista muy polémico y cuyo rendimiento ha disminuido mucho esta última temporada. El máximo mandatario blanco fue claro con él: "Si quieres ese dinero, gánatelo en el campo", algo que no se vio este último curso.

Florentino Pérez no quiere darle al brasileño lo que está pidiendo

El Madrid está viviendo una situación muy complicada con la incertidumbre por la renovación de Vinicius y, además, hay algunos jugadores a la expectativa para renovar al alza como su compañero, mientras que otros como el propio Mbappé están pendientes de la continuidad del brasileño por si tienen que poner el grito en el cielo y reclamar lo que se le prometió en su día: ser el mejor pagado de la plantilla.