Huijsen va de mal en peor con Xabi Alonso
El joven central malagueño atraviesa su momento más delicado desde la llegada de Xabi Alonso
La temporada de Dean Huijsen en el Real Madrid está lejos de lo que se esperaba cuando aterrizó en el Santiago Bernabéu. Su fichaje, tras una notable campaña en el Bournemouth, fue visto como una apuesta de presente y futuro: un central moderno, con salida limpia de balón, personalidad y una proyección enorme. Sin embargo, con el paso de las jornadas, su situación ha ido de mal en peor en los planes de Xabi Alonso.
Huijsen ha participado esta temporada en 14 partidos de Liga como titular, además de varias apariciones en otras competiciones, pero su rendimiento ha ido claramente de más a menos. La confianza inicial del técnico donostiarra se fue diluyendo a medida que aparecieron errores, dudas defensivas y una inseguridad impropia de un jugador llamado a marcar época.
De titular indiscutible a perder el sitio
El punto de inflexión llegó cuando Xabi Alonso volvió a confiar plenamente en la pareja Militao–Rüdiger. La bajada de rendimiento del malagueño coincidió con un contexto menos favorable para su fútbol. Cuando el Madrid presionaba alto, dominaba campo rival y jugaba lejos de su área, Huijsen brillaba: iniciaba jugadas casi desde la medular, anticipaba y corregía con solvencia.
Pero el escenario cambió. En partidos donde el Madrid defendió más bajo, como en el derbi ante el Atlético, en Vallecas o en Anfield frente al Liverpool, Huijsen pasó a perseguir sombras, sufriendo a la espalda y mostrando nervios. Ante el Liverpool, perdió 15 balones y falló 14 pases, cifras que encendieron las alarmas. En Vallecas, además, fue sustituido al descanso tras ver una amarilla.
Sin Militao, más dudas que certezas
Otro factor clave ha sido la lesión de Militao. El brasileño era su gran referencia: líder, corrector y guía. A su lado, Huijsen se sentía liberado y aprendía. Con Rüdiger, en cambio, apenas ha coincidido como titular una vez, en la segunda jornada ante el Oviedo, y la adaptación está siendo lenta.
Para colmo, el malagueño estuvo tres semanas en la enfermería por molestias en la rodilla, aunque las dudas ya venían de antes. Mientras tanto, Raúl Asencio ha empezado a sumar minutos y aparece como una competencia real. La lesión de Militao puede abrir una nueva ventana de oportunidad, pero Huijsen necesita reaccionar ya. El talento sigue ahí, pero el margen de error se reduce en un Real Madrid que no espera a nadie.