Florentino Pérez, ahora sí, acepta negociar a pesar de haber sido intocable con Ancelotti
El Madrid apuesta por la renovación y la juventud mientras cierra el capítulo de los veteranos


El Real Madrid sigue en plena evolución. La plantilla actual combina jugadores con experiencia y jóvenes talentos que empiezan a asomar con fuerza. El club, bajo la dirección de Florentino Pérez, ya no apuesta solo por nombres consagrados; busca equilibrio, frescura y, sobre todo, sostenibilidad financiera. En defensa, esta renovación es clara. El regreso de Éder Militão tras lesión y la incorporación casi cerrada de Ibrahima Konaté, procedente del Liverpool, son ejemplos de esta apuesta por rejuvenecer el equipo.
Además, jóvenes como Dean Huijsen y Raúl Asencio están ganando minutos y confianza. Esta combinación busca no solo competir al máximo nivel, sino también evitar cargas económicas que podrían complicar el Fair Play Financiero. En ese sentido, Florentino Pérez, quien siempre fue firme en mantener ciertos jugadores intocables para Ancelotti, ahora abre la puerta a cambios importantes para mantener el Madrid en la élite.
Rüdiger y su futuro fuera del Bernabéu
Antonio Rüdiger, uno de los pilares defensivos desde que llegó gratis en 2022, parece tener los días contados en el Santiago Bernabéu. Aunque su rendimiento ha sido clave, las lesiones y su elevado salario han inclinado la balanza. El club ha decidido no extender su contrato, que expira en junio de 2026. Según fuentes como Diario AS y BILD, ni Rüdiger ni la directiva han iniciado negociaciones para su renovación, lo que confirma que el alemán formará parte de la llamada “rampa de salida”.
Esta decisión simboliza el fin de un ciclo en la defensa madridista y la apuesta por un relevo generacional que ya está en marcha. Para Rüdiger, las opciones son varias: un posible regreso a la Premier League, donde brilló con Chelsea, ofertas millonarias desde Arabia Saudí, o incluso destinos en la Serie A o la Bundesliga. Su agente ya trabaja para encontrarle un nuevo reto que siga valorizando su experiencia y calidad. Así, el Madrid se prepara para seguir renovando su plantilla, liberando espacio y recursos para nuevos proyectos defensivos. Esta decisión refleja claramente cómo el Real Madrid, bajo el mando de Florentino Pérez, no teme reinventarse y adaptarse a los tiempos actuales, incluso cuando eso implica dejar ir a jugadores que en su momento parecían intocables e indispensables para el equipo.