Dani Carvajal saca los colores a Xabi Alonso en la Roja

El lateral madrileño ha demostrado que ha vuelto a un gran nivel de la lesión

Dani Carvajal está muy de vuelta. El lateral del Real Madrid ya está recuperado al 100% de la grave lesión en la rodilla que sufrió a inicios de la temporada pasada y que lo tuvo en el dique seco durante toda la campaña. Durante el Mundial de Clubes, el capitán volvió a los terrenos de juego, y ahora, habiendo empezado ya el presente curso, el jugador está superando las expectativas.

De hecho, el defensa le estaría sacando los colores a Xabi Alonso y los planes que tenía el tolosarra con él en el conjunto blanco. En un principio, y teniendo en cuenta su edad, tanto el cuerpo técnico como el club pensaban que Carvajal tardaría mucho en recuperarse e incluso se cuestionaban si podría volver a su mejor nivel, por lo que se fichó a Trent Alexander-Arnold para la banda.

Dani Carvajal está como un toro y ya ha vuelto a la selección

Sin embargo, el madrileño ha vuelto a un nivel espectacular e incluso con un mejor rendimiento que su nuevo compañero en el lateral derecho, lo que ha provocado que Alonso haya tenido que hacer algunos cambios y quitarle esa titularidad por decreto al inglés, algo impensable hace un par de meses, cuando Carvajal seguía lesionado y el exjugador del Liverpool era el gran fichaje.

Además, y en la primera convocatoria de la selección española que Luis de la Fuente realizó al empezar la temporada, Carvajal ha sido llamado a filas, lo que demuestra la importancia que tiene el jugador, no solo en el Madrid, sino también en la Roja, y en el gran momento físico en que se encuentra, ya que tras salir de una grave lesión de rodilla, no es normal que enseguida se le convoque para la selección.

El madrileño ya no se acuerda de su grave lesión de rodilla

En el conjunto blanco, el madrileño ya le quitó la titularidad en un partido a Alexander-Arnold en este inicio de Liga, y si la situación no cambia, Alonso no tendrá más remedio que colocar al capitán del equipo en el terreno de juego y dejar al inglés en el banquillo, ya que no tendrá más excusas para no hacerlo.