Courtois y Huijsen, cónclave con tres pesos pesados más del vestuario para encontrar la solución
El portero y el joven central reunieron a Carvajal, Vinícius y Valverde tras la victoria ante el Espanyol para exigir más intensidad defensiva de cara a los grandes partidos
La victoria del Real Madrid ante el RCD Espanyol dejó tres puntos importantes en el casillero, pero también encendió las alarmas en el vestuario. Thibaut Courtois y Dean Huijsen, dos de las voces que están ganando peso dentro del equipo, decidieron dar un paso adelante y reunir a tres de los jugadores con más influencia del plantel: Dani Carvajal, Vinícius Júnior y Fede Valverde. El motivo, según ha trascendido, fue claro: la falta de intensidad defensiva que se ha visto en los últimos compromisos, algo que podría pasar factura cuando lleguen los choques de mayor exigencia en la temporada.
Lejos de ser un gesto de reproche personal, el cónclave buscaba encender la alerta en un grupo que, pese a las victorias, no termina de mostrar la solidez colectiva necesaria. Courtois, con su habitual visión privilegiada desde la portería, fue contundente: el equipo no puede seguir permitiéndose desconexiones en la presión ni en los duelos individuales.
El aviso de Courtois y Huijsen
El guardameta belga, que conoce lo que significa sostener al equipo en noches complicadas, puso el acento en que los rivales de mayor nivel no perdonarán los espacios ni la falta de intensidad. A su lado, Huijsen, pese a su juventud, habló con determinación. El central considera que la defensa no puede ser solo tarea de los zagueros, sino un esfuerzo colectivo en el que todos, desde el primer delantero hasta el último defensor, deben implicarse.
Este gesto del neerlandés, que ya se perfila como un futbolista con carácter de líder, fue bien recibido por Carvajal y Valverde, aunque también generó cierta sorpresa en Vinícius, quien ha sido criticado en varias ocasiones por su falta de rigor defensivo.
Mirando a los grandes desafíos
El mensaje que Courtois y Huijsen quisieron transmitir es que el Real Madrid necesitará un bloque fuerte para competir con garantías frente a los grandes de Europa. La intensidad defensiva, la presión ordenada y la concentración en cada duelo individual serán determinantes para no sufrir ante equipos que explotan cualquier debilidad.
El cónclave no buscó señalar a nadie, sino reforzar la idea de que las victorias del día a día no deben esconder los problemas estructurales del equipo. El vestuario blanco sabe que la temporada es larga, y que las noches decisivas llegarán pronto. Y en esas citas, el Real Madrid no podrá regalar nada.