Castigado sin jugar contra el Mallorca por la falta de solidaridad que Xabi Alonso no perdona
Xabi Alonso castiga la falta de solidaridad de Endrick
El inicio de temporada en el Real Madrid está dejando claro que Xabi Alonso no concede margen a la indisciplina ni a la falta de entrega. El técnico vasco ha señalado a Endrick, el joven delantero brasileño llamado a ser una de las grandes promesas del club, y ha decidido que no participará en el próximo encuentro frente al Mallorca. El motivo es contundente: el jugador no se ha mostrado comprometido en los entrenamientos y, además, ha llegado tarde en varias ocasiones, algo que el entrenador no está dispuesto a tolerar.
Endrick, que aterrizó en Madrid con el cartel de futura estrella y con el respaldo directo de Florentino Pérez, se encuentra ahora con la primera advertencia seria en su corta carrera en Europa. Xabi Alonso exige que todos sus jugadores, independientemente de su estatus o proyección, se entreguen al cien por cien en el día a día. Y el brasileño, con apenas 18 años, ha dado muestras de cierta desconexión que no han pasado desapercibidas en Valdebebas.
Una llamada de atención que puede marcar su futuro
En el Real Madrid preocupa que Endrick, acostumbrado a ser la gran figura en Palmeiras y a tener un entorno que lo protege, no esté gestionando bien la presión y las exigencias de un club como el blanco. Su adaptación al fútbol europeo exige un plus de sacrificio que, por ahora, no se le ha visto.
El castigo contra el Mallorca es un mensaje que podría marcar un antes y un después en su camino. Si el delantero entiende la lección y se compromete con el trabajo diario, podrá recuperar la confianza de Xabi Alonso y comenzar a ganarse minutos en el once. Pero si persiste en actitudes de indisciplina, el riesgo de que su progresión se frene es alto.
Alonso impone los méritos personales
El técnico quiere que el vestuario entienda que la meritocracia es la norma: no se juega por nombre, ni por futuro, sino por esfuerzo y disciplina. El castigo a Endrick busca ser un toque de atención tanto para él como para cualquier compañero que piense en relajarse.
El brasileño tiene talento de sobra, pero en el Real Madrid eso no basta. La exigencia es máxima y, como ha dejado claro Xabi Alonso, no habrá privilegios para nadie. Endrick tiene ante sí la oportunidad de reaccionar o de quedar señalado demasiado pronto en su nueva aventura europea.