Asencio y Xabi Alonso, 40 minutos encerrados en el despacho, se lo han dicho todo a la cara

Asensio está molesto por su pérdida de protagonismo, y Xabi Alonso le exige más compromiso y constancia

En Valdebebas se vivió una escena de tensión contenida entre Raúl Asensio y Xabi Alonso. Según fuentes cercanas al vestuario, técnico y jugador mantuvieron una conversación privada de más de 40 minutos en el despacho del entrenador del Real Madrid, donde se dijeron todo a la cara. El encuentro, solicitado por el propio Asensio, tuvo como objetivo aclarar las discrepancias que ambos vienen arrastrando desde hace semanas, motivadas por la pérdida de protagonismo del balear en los planes del técnico.

Asensio, que llegó al Madrid hace años como una de las grandes promesas del fútbol español, vive un momento complicado. Ha pasado de ser un jugador habitual en las rotaciones importantes a ocupar un papel mucho más secundario, acumulando suplencias y pocos minutos en los últimos partidos. La situación ha generado frustración en el futbolista, que considera que no ha tenido continuidad suficiente para demostrar su verdadero nivel.

Xabi Alonso le exige más constancia y carácter

Durante la conversación, Xabi Alonso fue directo y transparente. Le explicó a Asensio que su descenso de minutos no es personal, sino consecuencia de una decisión técnica basada en rendimiento y actitud. El entrenador valora su calidad, pero le reprocha que su implicación en los entrenamientos no ha sido la esperada y que en los partidos le falta agresividad, sobre todo cuando el equipo no tiene la pelota.

Alonso, que ha impuesto una línea de exigencia muy alta desde su llegada, le pidió “dar un paso adelante” y demostrar que todavía puede ser importante. Asensio escuchó, reconoció parte de la crítica, pero también expresó su sensación de estar siempre en el punto de mira, sin margen para los errores que otros sí tienen. La charla fue tensa, pero con respeto mutuo.

Una relación que necesita un punto de equilibrio

La reunión dejó claro que entre ambos existe respeto, pero también distancia. Xabi Alonso no le ha cerrado la puerta, pero le ha dejado un mensaje claro: si no eleva su nivel y su constancia, su rol seguirá siendo secundario. Asensio, por su parte, se siente con fuerzas para revertir la situación, aunque sabe que el tiempo juega en su contra.

El madridismo espera que esta conversación marque un antes y un después. El talento de Asensio es innegable, pero Xabi Alonso busca algo más: regularidad, compromiso y hambre competitiva. Solo así volverá a ganarse un sitio en el once blanco.