Se arrepiente de ir con Arteta: el crack que tuvo una oferta del Barça

William Saliba tuvo ofertas muy importantes de varios clubes ‘top’ de Europa. Pero finalmente se decantó por el Arsenal, que pagó 30 millones de euros, si bien le dejó cedido una temporada más en el AS Saint-Étienne, para que se siguiera formando y curtiendo. Y allí formó una dupla sensacional junto a Wesley Fofana, un año mayor que él, y que también atrajo el interés de varios conjuntos muy importantes. Y ambos acabaron en la Premier League.

Sin embargo, mientras este último es pieza clave en el Leicester City de Brendan Rodgers, y estaba siendo titular y una de las revelaciones, el primero ni ha debutado a las órdenes de Mikel Arteta. De hecho, le ha dejado fuera de la lista de inscritos para la Europa League, competición en la que podría tener minutos. Ni los problemas defensivos que atraviesan los londinenses le han servido al internacional galo sub 20 para que le den una oportunidad.

Se ha tenido que resignar y conformar jugando en el filial, que se le queda bastante pequeño, a decir verdad. A sus 19 años, no está nada satisfecho con su rol actual, como es lógico, y no ha tenido problemas en mostrar su enfado, que es más que evidente. Su progresión corre serio peligro, e incluso se está barajando la posibilidad de que se marche cedido en el cada vez más cercano mercado invernal. O, incluso, que sea vendido de nuevo.

Y Saliba comienza a arrepentirse de la decisión que tomó, apostando por su futuro en el Emirates Stadium, cuando tuvo mejores opciones. Pero creía que allí iban a tener más paciencia y le iban a dar más confianza que en otro lugar, motivo por el que rechazó el resto de ofertas. Entre ellas, aseguran que había una del Barça, que manejaban informes realmente favorables, que aconsejaban su contratación, siendo una apuesta de presente y de futuro.

Visto lo visto, en el Camp Nou se libraron de un pufo importante, y que no hubiera sido nada barato. La experiencia con Jean-Clair Todibo ya aconsejaba tomarse las cosas con más calma.

Arteta está siendo su gran verdugo.