La última bala de Jurgen Klopp para olvidar a Virgil van Dijk
Se le acaban las opciones para cubrir las bajas
El Liverpool de Jurgen Klopp llega esta tarde a Anfield con la obligación de ganar al Manchester United si no quieren dar alas al equipo de Solskjaer en la carrera por la Premier League. De los últimos nueve puntos posibles, los reds solo han podido rascar dos, y hay que tener en cuenta que no eran rivales de la parte alta de la tabla: empate contra West Brom, empate contra el Newcastle y derrota frente al sorprendente Southampton.
Esta racha ha sumido al conjunto de la ciudad de Los Beatles en una dinámica negativa, totalmente opuesta a la del conjunto de Manchester. Este partido no podía pillarles en peor momento. Las graves lesiones de Virgil van Dijk y Joe Gomez han dejado al Liverpool con una defensa de circunstancia que transmite especial desconfianza sabiendo el rival que van a tener en frente. Bruno Fernandes, Cavani, Rashford y compañía quieren asaltar Anfield y dar un golpe sobre la mesa para empezar a creer que de verdad pueden ganar al título liguero.
Para más inri, Joel Matip, el tercer central de este equipo, también se veía obligado a abandonar los terrenos de juego por una lesión, esta vez muscular, que lo ha tenido apartado desde el encuentro contra el West Brom. Sin embargo, todo apunta a que podría estar recuperado para hacer frente a los red devils, aunque Klopp sabe que es un riesgo. De momento, los centrales de circunstancia han sido Fabinho, Henderson y dos canteranos: Williams y Phillips, que lógicamente no han sido capaces de rendir al mismo nivel que los lesionados van Dijk y Gomez.
Por su parte, Klopp es consciente de que la situación es límite y, más allá de ser capaces de sacar un buen resultado o no frente al Manchester United, si no quieren que la temporada se les vaya de las manos, necesitan regularidad y garantías en la defensa central. El míster alemán ya barajaba el nombre de Ben White, del Brighton, pero su club se encuentra en una situación complicada, coqueteando con el descenso, por lo que no tienen intención de hablar de venta antes de verano. Este hecho ha obligado a Klopp a activar el plan de emergencia: Maksimovic.
El central serbio de 29 años está viendo como en el Nápoles el kosovar Rrahmani se está empezando a ganar el favor de Gattuso como acompañante de Koulibaly y Manolas, por lo que no vería con malos ojos un cambio de aires, sobre todo sabiendo que en esta temporada del Liverpool sí será importante.