Klopp y Guardiola, sin pelos en la lengua, arremeten contra el Chelsea

La pareja coincide en que "lo que hizo el gobierno está bien"

La situación que atraviesa el Chelsea ha consternado a la Premier League y al mundo del fútbol. El conjunto blue tiene un futuro confuso y las penalizaciones impuestas por el gobierno de Boris Johnson sobre el equipo del magnate Román Abrámovich pueden tener consecuencias para el resto de clubes, como ya las están teniendo los jugadores del propio club.

En medio de este panorama, han sido varias las personalidades del mundo del fútbol que se han pronunciado al respecto, entre ellos, Pep Guardiola, Jüger Klopp o Conte, quienes no han dudado en respaldar al gobierno británico en su decisión y lamentar lo ocurrido.

El último en tomar la palabra ha sido el exentrenador del FC Barcelona y actual dirigente de la plantilla del Manchester City. Su parecer ha sido el siguiente: "El mundo sigue callado, no la gente de pie, pero los gobiernos de todo el mundo que tendrían que tomar decisión o decir que esto no puede ser así...", afirmó el técnico citizen.

Por su parte, el entrenador del Liverpool, Jüger Klopp, ha asegurado que "no es una situación en la que todos los empleados del Chelsea sean responsables. Solo es un hombre y es Putin. No sé el papel de Roman Abramovich en todo esto pero se puede decir que está cerca. Creo que lo que hizo el gobierno está bien".

Además, el italiano Conte también fue cuestionado en rueda de prensa sobre esta situación: "es una lástima, la verdad, porque disfruté de dos temporadas allí. Trabajé en el club y gané dos títulos. Es una lástima que estén pasando por esto, no es fácil para los jugadores, ni para Thomas Tuchel, ni para la afición ni nadie relacionado con el Chelsea".

La situación podría modificar la actual clasificación de la Premier League. Según explica el 'Daily Mail', el Chelsea busca la manera con la que poder pagar a sus jugadores y al personal del club en los próximos meses, ya que la cantidad mensual podría ascender hasta los 34 millones de euros y, de no efectuarse el pago, los azulones tendrían que hacer frente a un castigo: se les descontaría un total de nueve puntos en la competición doméstica.