Kevin De Bruyne se planta: impone su condición y alerta a Florentino

El centrocampista belga lo exige sin tapujos, por 50 kilos, antes de sellar su renovación

Parece que esta semana el vendaval 'Filomena' ha trascendido más allá de las fronteras españolas, al menos en el ámbito deportivo, ya que el Manchester City ha recibido una de las peores noticias del curso en este mes de enero: Kevin De Bruyne cada vez se aleja más de su renovación.

A pesar de que el jugador belga tiene contrato aún hasta el año 2023, alberga una gran cantidad de ofertas de primer nivel mundial y, si Pep Guardiola y el jeque saudí no se mueven rápido, podrían ver cómo se esfuma uno de los mejores jugadores de la historia del club.

Pero la cúpula de los skyblues aún tiene una baza para evitar que esto ocurra, una baza millonaria, como no podría ser de otra forma. Aunque el entrenador catalán ha mostrado mucho interés en una larga lista de jugadores de primer nivel en el último verano, ahora es uno que no entraba en las quinielas el que ha tomado la delantera para ser la próxima incorporación del Manchester City: Manuel Locatelli.

El joven jugador italiano de 23 años pertenece a la disciplina del AC Milan pero actualmente se encuentra cedido en el Sassuolo. Aunque no tuvo mucha suerte en el conjunto rossonero y apenas tuvo minutos a lo largo del último año, esta temporada se ha erigido como uno de los mejores destroyer de la Serie A y, no conforme con hacer valer su espectacular despliegue físico en cada partido, también ha dejado credenciales notables en la parcela ofensiva: es un box-to-box de los que ya no quedan, un jugador tasado en 50 millones.

Sin duda alguna Locatelli es una de las últimas perlas del futbol italiano y en la selección está llamado a ser algo semejante a lo que ha sido Daniele De Rossi durante los últimos diez años. Aunque la faceta creativa no es la más dominada por el jugador, si finalmente aterriza en Manchester podría ser la amenaza perfecta para un Rodri Hernández que ha ido diluyendo su peso en el equipo conforme ha avanzado el tiempo y hoy en día está siendo más cuestionado que nunca.

Kevin De Bruyne ha dado su visto bueno para que el jugador aterrice en el club cuando finalice la presente temporada y se convierta, de esta forma, en el socio de lujo para el centrocampista flamenco en el centro del campo, ya que en los meses iniciales de esta campaña el Manchester City ha tenido sumas dificultades para crear ocasiones peligro y ha recibido goles con suma facilidad, algo que está dinamitando sus aspiraciones en este curso.

Por si las moscas, si este movimiento no llega a producirse, Florentino Pérez tendría una nueva oportunidad para tratar de hacerse con los servicios de De Bruyne, aunque su alto coste implicaría desechar la oportunidad de lanzarse a por Kylian Mbappé, la principal pretensión anhelada por el presidente para las próximas temporadas: aquí hay culebrón de los buenos, ya que otros colosos tampoco renuncian a la posibilidad de tentar al crack y sembrar el pánico en Manchester.