Este histórico del Real Madrid se pone a prueba y Zidane le toma nota

Ha revolucionado el mercado estival

Él ha sido uno de los quebraderos de cabeza del pasado periodo veraniego de fichajes. Tras una última temporada en Madrid en la que ha sido cuestionado continuamente tanto por Florentino Pérez como por Zinedine Zidane y la afición madridista, Gareth Bale debutará este finde con su nuevo equipo, que tan nuevo no es ya que militó en el Tottenham Hotspur durante seis temporadas antes de fichar por el Real Madrid.

Ahora, tras un par de años en el que ha estado prácticamente sin jugar, entre otras cosas, por sus continuas e innumerables lesiones, tiene la oportunidad de mostrar al mundo entero, especialmente a los madridistas, que sigue siendo un jugador TOP mundial.

Con José Mourinho a la cabeza del equipo y con superestrellas como Harry Kane o Heung-Min Son acompañándole en el ataque londinense, Bale se enfrenta este finde semana al que puede ser el mayor de sus miedos: dar un golpe en la mesa y reafirmarse como uno de los mejores jugadores del mundo o definitivamente demostrar que sus extraordinarias cualidades se han quedado en el jugador del pasado.

El Tottenham se enfrenta al West Ham United con la moral por las nubes tras la histórica paliza que le dieron al Manchester United hace dos semanas en Old Trafford. A pesar de que el equipo ha sufrido dos tropiezos en sus primeros cuatro partidos de competición doméstica, llega en un estado de forma óptimo en el que sus mejores jugadores tienen ese punto de frescura que les pueda dar muchas alegrías esta temporada. Con la llegada del extremo galés, por si fuera poco, contarán con otro rifle en el carril derecho.

El reestreno de Bale con el Tottenham tras su paso por el Real Madrid ha parado al mundo, ya que muchas son las personas que le han criticado las últimas temporadas y que pueden asistir ahora a un nuevo renacer del futbolista, que tiene más ganas que nunca de demostrar que, a sus 31 años, sigue atesorando unas cualidades encomiables en sus piernas.

Zidane y Florentino estarán con el ojo pegado al televisor para no perder detalle de todo lo que acontece en Londres el próximo domingo, cuando se estrene el galés con su nueva camiseta, aunque presumiblemente lo hará partiendo desde el banquillo.