Dembélé está celoso y no firma: Guardiola, culpable y el Barça espera

El delantero francés considera que lo que se le ha ofrecido no es lo justo y tiene envidia de su rival inglés

El culebrón de Ousmane Dembélé se sigue extendiendo en el tiempo. Renovar por el Barça o marcharse a otro equipo, esas son las dos únicas vías que tiene como alternativas el delantero francés pero lo cierto es que le está costando mucho decidirse. Ya ha demostrado en los últimos meses, no obstante, que no es un tipo que se agobie en exceso mirando por su futuro porque declinó varias ofertas de Joan Laporta, así que ahora no iba a ser menos.

Su futuro sigue sin aclararse. Como jugador joven y a sus 25 años de edad es una joya en el mercado a la que muchos clubes quieren arrimarse. Hay una buena pelea por tratar de convencerle pero por el momento el galo se lo sigue tomando con calma y está estudiando bien todas las opciones que se le van presentando. Una de las últimas en aparecer es la posibilidad de terminar jugando para el Chelsea, que ha llamado a su puerta para tratar de llevárselo a la Premier League y olvidar así sus malos momentos de lesiones que vivió en el Barcelona.

Los londinenses ya le han puesto sobre la mesa una oferta a Ousmane Dembélé pero el futbolista está un poco mosqueado según afirma desde Inglaterra el medio Metro. Cree que merece unas mejores condiciones y que el Chelsea no está echando el resto por él precisamente porque también tiene en su punto de mira a Raheem Sterling, el futbolista del Manchester City, y que los blues están jugando a dos bandas para ver cuál de los dos acepta primero.

Dembélé quiere ser el primero en la lista y le ha atacado un episodio de celos al no sentirse tampoco por el Chelsea como el más valorado de la agenda. Por eso, el francés está teniendo serias dudas de si aceptar en estas condiciones la oferta del club londinense o por el contrario esperar para ver si el Barcelona sube la oferta inicial. Dice el medio Metro además que los ingleses todavía podrían hacer un esfuerzo final e incluir una bonificación por el fichaje, algo que el Barça no estaría dispuesto a hacer, y que puede ser un aspecto fundamental para decantar todo en favor de los de Tuchel.