Aubameyang y dos más: los tres galácticos rechazados por Zidane

El Real Madrid necesita gol, algo que ha quedado en evidencia en los últimos partidos. Y que es un hecho, viendo sus pobres balances en las dos últimas temporadas, donde no han estado especialmente acertados. De hecho, han bajado una barbaridad sus registros desde la salida de Cristiano Ronaldo a la Juventus de Turín. Y han pasado de ser un equipo ultraofensivo, a uno ultradefensivo y rácano, que aburre hasta a sus propios aficionados.

Por eso, varios cracks se ofrecieron a Florentino Pérez este mercado de fichajes, dispuestos a ayudar a acabar con ese problema. El primero fue un viejo conocido, ya que Pierre-Emerick Aubameyang ya lo intentó cuando militaba en el Borussia Dortmund. Fue descartado, y acabó en el Arsenal, donde tenía contrato en vigor hasta 2021, y no tenía intención alguna en renovar. Por ello, podía cambiar de aires, y a un precio razonable.

Sin embargo, eso no bastó para convencer a un Zinedine Zidane que lo rechazó de inmediato. Y no le quedó otro remedio al internacional gabonés que prolongar su vínculo con los ‘gunners’, dirigidos por Mikel Arteta. El otro es Edinson Cavani, que se encontraba sin equipo desde junio, momento en el que expiró su compromiso con el Paris Saint-Germain, con el que ni siquiera disputó la fase final de la Champions League, al no llegar a un acuerdo.

Hubiera llegado gratis, y habría aceptado un papel más bien secundario, además de aportar una gran experiencia. En su caso, fueron sus elevadas pretensiones económicas las que echaron todo de por tierra, y acabó en el Manchester United, siendo anunciado en el último día. Por último, está Edin Dzeko, que lo tenía todo acordado con la ‘Vecchia Signora’, que finalmente le descartó para hacerse con Álvaro Morata.

La AS Roma le había abierto las puertas, pero el Madrid no estaba interesado en un futbolista que ya tiene 34 años. Y menos, si había que pagar un traspaso, por pequeña que fuera la cantidad. ‘Zizou’ prefirió quedarse a Luka Jovic y a Mariano Díaz antes que traer a alguien que no quería.

Más claro, cuesta mucho de encontrarlo.