Sería la estocada final de Guardiola a España y a ‘can Barça’: el Mundial 2026 será el testigo
El técnico catalán está sonando para dirigir en el próximo mundial de 2026
Como suele ser habitual, las grandes citas internacionales marcan cambios en las selecciones. España ya cambió de entrenador tras el pasado Mundial de Qatar y ahora podría ser el turno de Inglaterra en caso de que las cosas no salgan demasiado bien en la Eurocopa de 2024. En este sentido, si Gareth Southgate abandonara el cargo de seleccionador de Inglaterra, Daily Mail, apunta que la federación inglesa se ha fijado en Pep Guardiola como su futuro preparador.
Sueños rotos por partida doble
Guardiola no solamente es uno de los grandes anhelos imposibles del Barça y de Joan Laporta, sino que también lo ha sido de la selección española. El catalán es uno de los mejores técnicos del mundo y en la RFEF estarían encantados de contar con el de Santpedor como su seleccionador nacional. Sin embargo, ahora, todo apunta a dos caminos lejanos, tanto a Barça como a España. Estos caminos son, o bien, seguir en el Manchester City, donde es totalmente respaldado por directiva y afición, o bien, una aventura en la selección de Inglaterra de cara al Mundial de 2026.
La realidad es que Inglaterra se ha convertido en el nuevo hogar de Pep Guardiola y en su lugar ideal. El catalán llevará ya siete años en Inglaterra, donde se ha asentado y convertido en todo un referente. Además, el estilo de vida del fútbol inglés, mucho menos invasivo en el día a día, ha facilitado la vida de un Guardiola que ha encontrado en las islas su locus amoenus.
El contrato con el City, el obstáculo
Pese a que la opción está sobre la mesa. La realidad es que dicho movimiento sería muy complicado. Guardiola tiene contrato con el City hasta 2025 y dada la magnífica relación entre club y entrenador, parece imposible que ese contrato se rompa si no fuera por un acuerdo mutuo que beneficiara a ambas partes. En este sentido, debería ser Guardiola, el que viera su final en Manchester como algo necesario para optar al puesto de seleccionador, a no ser que decidiera combinar ambos cargos, algo que difícilmente interesara a alguna de las tres partes, pues ser entrenador de un gigante como el City ya trae el suficiente trabajo.