De locos: uno no irá a Qatar con Messi, brillan con Mourinho y Simeone

Dybala y Correa acaparan las dudas de Scaloni en cuanto a quien debe completar la convocatoria

La cita más esperada para todo futbolista se aproxima y los seleccionadores empiezan a ultimar la lista de los que no se la perderán. El Mundial de Qatar pone a prueba desde el principio de temporada a todos los grandes jugadores del planeta fútbol, y en la selección argentina saben muy bien lo difícil que es conseguir un billete entre tanto talento. A pesar de ello, Scaloni tiene, según cuenta TyCSports, casi decidido quienes viajarán al ansiado evento, con la única duda de un último integrante que saldrá de entre Paulo Dybala y Ángel Correa. A ellos además se añade Juan Foyth, que en función de si llega o no plenamente recuperado de su lesión, entrará en la lucha por dicho puesto.

Lo cierto es que los dos delanteros mencionados, viven un gran momento de forma en sus equipos. Dybala viene de firmar un sensacional partido en la victoria de la Roma ante el Empoli con gol y asistencia incluidos, lo que permite al conjunto giallorossi situarse quinto en la clasificación a tan sólo un punto del líder, el Nápoles. La temporada de la joya está siendo muy destacable a las órdenes de Mourinho, que terminó por convencer al argentino de su llegada tras la negativa del Inter a firmarle. El jugador ha caído de pie desde su multitudinaria presentación en la capital italiana.

Por otro lado, otro que viene haciendo méritos de sobra para estar en Qatar no es otro que Angelito Correa, que se ha metido de lleno en las quinielas tras revolucionar el partido de Champions del Atlético ante el Oporto y abrir la lata en el de Liga frente al Celta. El argentino es toda una garantía para un Simeone que siempre alaba su voluntad al servicio del equipo ya le toque salir de titular o desde el banquillo.

Dos jugadores que cuentan con todas las papeletas de ser los que se vayan a jugar la ansiada última plaza con la albiceleste para el Mundial. Y no sólo eso, sino también el privilegio de poder jugar junto a Leo Messi en el posiblemente último intento de la pulga por levantar un Mundial.