Croacia se alía con el Bernabéu y rescata la Champions de Zidane

No es ninguna sorpresa la importancia capital que tiene Luka Modric en cualquier equipo en el que esté. A sus 35 años, el que fuera Balón de Oro no solo es vital para Zidane, sino también para su selección. En este parón, que daba el pistoletazo de salida a la clasificación para el Mundial de Catar, el centrocampista ha hecho historia al convertirse en el jugador con más internacionalidades (135), superando a una leyenda como Srna. Ante Chipre volvió a jugar todo el partido, y Zidane lo vio con cara de preocupación, y es que él tampoco se esperaba un encuentro tan exigente, pero en el combinado nacional balcánico le ha tendido una mano. Zlatko Dalic, su seleccionador, ya ha dicho, para alegría de un Real Madrid que tras el parón se jugará la temporada, que Modric no disputará el tercer encuentro. 

El técnico galo debía estar rozando el paro cardíaco al ver cómo una selección como la chipriota daba tantos problemas a Croacia. Tras el parón, se las verán con el Elche y, después, la temporada se decidirá en la eliminatoria de cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Liverpool (trofeo que tiene prioridad en el club) y el partido frente al Barcelona en liga. Zidane sabe que depende directamente de su tridente en el centro del campo (formado por Casemiro, Kroos y Modric) para sacar la situación adelante, es por esto mismo por lo que no soportaba la idea de que, en partidos a priori fáciles, se viera tan castigado su crack. 

Dalic es consciente de lo que ocurre en su club y quiere mantener una buena relación, por lo que, a sabiendas también de que el próximo partido del martes les enfrenta a Malta, el que es el rival más asequible de todos los de este parón, dará descanso a Modric. Como ha reconocido frente a los micrófonos tras el partido, el plan es que no juegue para que pueda volver antes a Madrid, así podrá tener algo de descanso en unas piernas que pueden sufrir un bajón en el tramo final de la temporada. Eso es lo último que quieren ambos entrenadores, y es que, una caída en su rendimiento en estos meses también afectaría negativamente a su papel en la próxima Eurocopa que tendrá lugar este verano. 

A pesar de tener ya 35 primaveras, el nivel de Modric este curso está siendo de lo mejor del equipo merengue, que necesita que el genio croata marque el camino para salvar la temporada.