Argentina y Scaloni, a evitarlo: clave con la Francia de Deschamps

‘Les bleus’, favorita al título; la albiceleste sabe por dónde pasa el partido

La final de esta Copa del Mundo se ha tratado de vender como un encuentro en las alturas entre dos futbolistas del PSG, Kylian Mbappé, estrella del campeón, y Leo Messi, figura del aspirante, pero lo cierto es que el duelo de este domingo (16.00, hora española) es mucho más que eso. Por ejemplo, a nivel de colectivo, les bleus son favoritos, por ser campeones y por su credibilidad en las grandes citas. Es más, Lionel Scaloni y Argentina saben por dónde no pueden transitar con los franceses.

Si tenemos que poner en una balanza las características de uno y otro finalista, damos como favoritos a los pupilos de Didier Deschamps por varios motivos. El primero es su bloque, más diverso, versátil, físico y con mayor calidad que el argentino, pero no son los únicos elementos que dan ventaja a los europeos, hay más, y en este tipo de citas suelen pesar. 

El primero de todos es la experiencia. Muchos de los jugadores franceses, tanto algunos jóvenes, el mismo Mbappé, como otros veteranos, como Hugo Lloris, saben lo que es jugar una final y lo que es más importante, saben lo que es ganarla; tales cosas no ocurren con Argentina. Por otro lado, Francia sabe acogerse a diferentes registros en un partido, desde cierto fútbol control hasta la presión alta, el disparo de media distancia y el juego directo, y esa enorme polivalencia se la da su innumerable raudal de atributos, con jugadores rápidos, potentes y habilidosos. Argentina, sin tanto pero con esos recursos también enfatizados, sí va a lucharle la intensidad a los galos, y por ahí puede venir una de las claves en favor de los sudamericanos.

Asimismo, Sclaoni sabe por dónde no puede transitar el partido: con viento en contra. Ambos, tanto Francia como Argentina, se han visto con el marcador a favor en estas rondas eliminatorias, por lo que no sabemos qué nivel de respuesta pueden tener con el tiempo en contra. No obstante, si cabe, de los dos equipos, el más peligroso cuando el rival va por detrás es Francia, que con espacios es un grupo demoledor. La reacción ante un marcador adverso es un déficit que sacude a sendos equipos, pero a la hora de buscar el juego directo, el poderío físico y la velocidad de los jugadores franceses les da un plus con respecto a los argentinos. También en espacios abiertos. 

Luego está la magia, los errores, un contratiempo inesperado, el árbitro e incluso la suerte, todos ellos factores indescifrables en una final. Pero en la lectura superficial, Argentina ya sabe qué clase de rival tiene enfrente con los de Deschamps: el peor posible.