Tras escaparse Georginio Wijnaldum, Koeman pide este medio al Barça

Ronald Koeman pidió el fichaje de Georginio Wijnaldum al Barça. Y, tras no poder concretarse el verano pasado, por culpa del trato de no agresión que tenían con el Liverpool, esperaban que lo hicieran en este. Joan Laporta le prometió que lo intentaría, y jugaba con la ventaja de que podría llegar a coste cero, pues acababa contrato en junio. Pero se toparon con el Paris Saint-Germain de Mauricio Pochettino, que estuvo mucho más rápido.

Eso si, también hay que decir que le pagaban bastante más que los azulgranas, lo que claramente desequilibró la balanza. El técnico holandés asume la derrota, pero espera que le compensen por perder a uno de sus objetivos prioritarios, y le traigan a otro crack con características similares. Es decir, que tenga un gran recorrido, capacidad de ida y vuelta, llegada al área rival, trabajo, técnica y esfuerzo. Justo como se describe a sí mismo Denis Zakaria.

El crack del Borussia Mönchengladbach es uno de los mejores ‘box to box’ que hay ahora mismo en Europa, y está más que preparado para dar el salto a un grande. Ofertas no le han faltado, como del Bayern de Múnich o del Arsenal. Después de que ‘Los Potros’ no consiguieran clasificarse a competiciones europeas para el curso próximo, ha pedido marcharse. Además, su entrenador, Marco Rose, ya está a los mandos del Borussia Dortmund.

El internacional suizo, otro de los nombres a seguir en la Eurocopa, gusta mucho, y tiene solamente 24 años. El problema será su elevado precio, pues, hasta hace poco, venían pidiendo hasta 50 millones de euros para dejarle marchar. No obstante, viendo la necesidad de ingresos que tienen, y el deseo del futbolista de marcharse, podría salir por bastante menos. Todo dependerá, en gran medida, de lo que ocurra con Ilaix Moriba, de unas condiciones idénticas, y al que le quedan 12 meses de contrato.

La intención del Barça es renovarle, pero se están encontrando muchas trabas, y, en caso de no llegar a un acuerdo, tendría que ser traspasado. Porque la idea de perderle a coste cero no se pasa por la cabeza.

Lógico.