Thomas Tuchel y Simeone tras la pista de Al-Khelaïfi y Messi

Con el proyecto de París haciendo agua, llegan las propuestas para estabilizarlo

El Paris Saint-Germain esta temporada era un transatlántico con serias posibilidades de naufragio; no en la Ligue 1, donde con el talento desmedido de su plantilla le da para navegar sin sobresaltos la temporada, pero sí en Europa, donde las fuerzas tienden a igualarse y los oponentes poseen armas más eficientes para encontrar fisuras. Y el PSG tenía muchas. De todas ellas, Pochettino será la primera en ceder, también porque es la más evidente, y sobre su caída hay que encontrar un parche robusto en el mercado, serio, eficiente, que se ponga al timón.

Como no, hay dos candidatos ya sobre la mesa del PSG y a sendos entrenadores les puede caer en poco tiempo una doble propuesta muy prometedora: la de dirigir al PSG la temporada que viene, poniéndose así al frente de un conglomerado de estrellas mundiales; y, además, un contrato suculento amén de una garantía: llegarán ciertos títulos con toda seguridad a sus respectivos palmareses, los nacionales (en la competición francesa), y se tendrá equipo para luchar por la Champions League, como ocurre todos los años en el gigante galo.

Esta doble propuesta debería ser suficiente para volver a tentar a Thomas Tuchel, que podría dejar el Chelsea al término de la presente temporada, o al Cholo Simeone, uno de los favoritos ahora mismo por Nasser Al-Khelaïfi para estabilizar la indisciplina y falta de gobierno del vestuario. El jeque ha pedido mano dura y personalidad, por lo que quién mejor para sendas cosas que el míster argentino, un reputado efectivista.

Eso sí, siendo como es el Cholo el entrenador mejor pagado del planeta, el equipo de París tendrá que tentarlo con mucho dinero (suponemos que al menos con la misma cantidad que cobra en Madrid); el proyecto, que está por definir, y libertad absoluta de maniobra, lo que incluye poder obrar a su gusto con las estrellas como Neymar, Messi, Verratti y compañía. Si el Cholo quisiera probar suerte en París (o llegado el caso, Tuchel intentar una segunda vez en el banquillo de París) hay algo seguro: llega mano dura al Parque de los Príncipes, que se preparen las estrellas de la capital gala.