Neymar pide su despido para atar al bombazo: refuerzo listo, 60 kilos

Tridente de lujo para el PSG si finalmente se marcha Mbappé: Di María sonríe

Fue una de las revelaciones del curso pasado y por eso muchos de los mejores equipos del continente quieren atarlo cuanto antes, entre ellos el PSG. Lucas Ocampos, a pesar de que ha comenzado la temporada dejando unas sensaciones menos cautivadoras que las del año pasado, está en la órbita de los mayores colosos del continente y podría abandonar el Sevilla en la próxima ventana invernal. Fuentes cercanas al jugador afirman que actualmente no está cómodo en el club y por ello estaría buscando cambiar de aires para retomar las excepcionales sensaciones que mostró hace unos meses. 

Por su parte, el conjunto comandado por Julen Lopetegui está siguiendo muy cerca al que puede ser la moneda de cambio del argentino: Julian Draxler. El jugador alemán apenas entra en los planes de Thomas Tuchel y no vería mal una salida del club siempre y cuando las condiciones económicas que le ofrezca su destino sean llamativas para él. La venta de Ocampos podría dejar en el Hispalis una cantidad cercana los 60 millones de euros, una cifra que Monchi utilizaría, en parte, para atar al centrocampista germano y convertirle en la nueva perla de la plantilla andaluza.

Por su fuera poco, el Sevilla baraja también otra incorporación de primer nivel. Aunque prácticamente no ha participado en lo que llevamos de temporada, Kepa Arrizabalaga es uno de los principales propósitos del club, lo que sería un refuerzo de primera categoría para la portería. No obstante, su traspaso se antoja altamente complicado ya que el jugador vasco aterrizó en Londres a cambio de 80 millones, por lo que su caché es bastante alto. Por ello, la opción que baraja Lopetegui es la de una cesión de seis meses con opción a otra más, siempre y cuando los andaluces se decidan a lanzarse a por él en la próxima ventana invernal.

Los cuarenta días que restan para que comiencen las hostilidades a partir del próximo 1 de enero se prevén moviditos en las oficinas del Sevilla y del PSG, ya que ambos equipos esperan reforzar sus plantillas de una forma gratificante para encarar el tramo decisivo del curso con las máximas esperanzas posibles: intercambio sellado, ambos han dado el OK.