Messi y Neymar dejan tirado al PSG con un gesto que Al-Khelaïfi no perdonará: su enfado es de época
El conjunto parisino ha acabado su temporada perdiendo de nuevo
El PSG ha firmado una de las peores temporadas de su historia reciente. El conjuto parisino ha estado envuelto en numerosas polémicas provocadas por sus tres grandes estrellas de la delantera. Además, en lo que respecta a títulos, el enésimo gran fracaso en Liga de Campeones, donde cayeron de nuevo en los octavos de final, marcó el principio del fin de un proyecto que nunca funcionó como debía, ya que contaba con la mejor delantera posible en el mundo juntando a Messi, Mbappé y Neymar con un tridente que aspiraba a competirle a la MSN o a la BBC.
Ante esta situación, el PSG no pudo sino despedirse jugando de la misma forma que lo hizo durante todo el año. Con un juego pobre y sin un resultado positivo, la tónica habitual en un año donde ni Messi fue capaz de hacer jugar bien a los suyos. El partido terminó con un estrepitoso 2-3 dando la victoria al Clermont.
Sin embargo, lo peor del partido no fue el resultado, sino el feísimo gesto de Messi y Neymar hacia su afición, o mejor dicho el feo no gesto, ya que ninguno de los dos quiso quedarse en el campo para despedirse de la afición y disculparse por el pésimo partido y la todavía por temporada que han disputado. El PSG estaba dando la vuelta de honor al campo con el título de liga cuando ambos jugadores decidieron abandonar el césped e irse hacia el vestuario, dejando así plantada a toda su afición y a sus compañeros, que vieron a sus estrellas marcharse con cara de muy pocos amigos.
Con el final de la temporada también llegará el adiós de muchas piezas del equipo, entre ellas Messi, Neymar y Sergio Ramos, junto con el entrenador, Galtier y con la posibilidad de ver a Mbappé forzar su salida hacia el Real Madrid.
Así pues, el PSG pone punto y final a una temporada para olvidar y que marcará un antes y un después en su historia, ya que obligará a salir a muchos de sus teóricos jugadores estrella que realmente no aportaban lo suficiente al equipo en los momentos más importantes.