Mauricio Pochettino le traiciona: este jugador del PSG llama al Barça

Joan Laporta tiene su propuesta

Moise Kean fue una de las grandes revelaciones a principios de esta temporada, pues sorprendió a todos con su rendimiento en los primeros meses. Había relanzado su carrera en el Paris Saint-Germain, e incluso fue capaz de sentar a Mauro Icardi, que ha tenido un año para el olvido. De esta forma, volvió a recordar a su mejor versión, y el porqué era considerado como una de las grandes promesas, no solo de Italia, si no de todo el planeta.

Hay que recordar que, en su día, tuvo una fuerte irrupción en el primer equipo de la Juventus de Turín, que se lo robó al Torino cuando era un chaval. Tras superar una cesión al Hellas Verona, en la Serie A, volvió y tuvo un rol importante para Massimiliano Allegri, que suena para ser el entrenador del Real Madrid. Y se hinchó a marcar goles en el último tramo del curso, lo que le valió para ser convocado para la selección italiana absoluta.

Tras negarse a renovar con ‘la Vecchia Signora’, tuvo ofertas de varios clubes ‘top’, pero finalmente se decidió por la Premier League, y acabó en el Everton. Allí, solo duró un año, y fue un fracaso absoluto, lloviéndole críticas de todos los colores, y motivándole a que se marchara el pasado verano. Carlo Ancelotti intentó recuperarle para la causa, pero no fue posible, y Mino Raiola consiguió que tuviera una reválida en el Parque de los Príncipes.

Kean comenzó con mucha fuerza, e incluso fue titular en el partido de ida de los octavos de final de la Champions League, ante el Barça, marcando un gol. Pero, de la noche a la mañana, ha desaparecido por completo de las alineaciones, y no entra en los planes de Mauricio Pochettino. No juega ni en la Ligue 1, y han decidido que no harán efectiva la opción de compra de la que disponen, que está valorada en unos 30 millones de euros, aproximadamente.

El ‘nuevo Mario Balotelli’, como le apodaban, tampoco tiene previsto volver a Goodison Park, donde Dominic Calvert-Lewin le cierra las puertas, y por eso se ha ofrecido en el Camp Nou.

Una opción que Joan Laporta ni ha estudiado.