Esto que dicen de Mbappé no hará ni pizca de gracia al Real Madrid

A Florentino Pérez ya le ha llegado

Kylian Mbappé no está en su mejor momento de forma. Sigue siendo decisivo, pues es un futbolista con unas cualidades tremendas, como velocidad, potencia, olfato, inteligencia… y en la Ligue 1 se pasea. Pero tampoco se puede decir que esté asombrando, ni siendo la estrella de su equipo, el Paris Saint-Germain. Ese papel ha quedado reservado para un Neymar Junior que en estos momentos es mucho más determinante y diferencial.

Ante el Manchester United, fue uno de los señalados por la derrota de los vigentes subcampeones de la Champions League. Pasó completamente inadvertido, y todos esperaban que demostrara su nivel en un gran escaparate. Porque, en la final, contra el Bayern de Múnich, también hizo una actuación bastante floja, errando un par de ocasiones muy claras. Y varios expertos creen que los rumores sobre su traspaso le están afectando.

El ex del AS Mónaco tiene pie y medio fuera del Parque de los Príncipes, pues su contrato acaba en 2022, y se niega a renovar. Y no deja de ser vinculado al Real Madrid, ya que señalan que es la gran prioridad para Florentino Pérez y Zinedine Zidane, que están obsesionados con él, y que pondrán toda la carne en el asador. El internacional francés está distraído, y no es ningún secreto que no está plenamente concentrado en rendir al 100%.

Aunque en las últimas horas se ha conocido que Mbappé también está devastado por la muerte de su amigo Lucas, al que le dedicó su último gol. Se trata de un niño con cáncer con el que entabló amistad en los últimos meses, y con el que compartió diversas imágenes en sus redes sociales. Obviamente, una pérdida así ha tenido que influir a la hora de saltar al campo. Pero pronto espera volver con más fuerza que nunca.

En el Santiago Bernabéu no le perderán de vista. Pero ya han sido avisados: el campeón del Mundial de Rusia de 2018 no es todo lo fuerte psicológicamente que esperaban. Porque confiaban en que lograra dejar atrás sus problemas a la hora de saltar al césped.

Si no, la presión puede hacerle mucho daño.