El sucesor de Cristiano Ronaldo se va con Neymar y Mbappé al PSG

El Real Madrid se llevó un gran fiasco con él

La carrera de Jesé Rodríguez en el Real Madrid apuntaba muy alto, tanto que se le situaba como el heredero natural en la plantilla merengue de Cristiano Ronaldo. Su potencia en arrancada y su habilidad, unidas a su facilidad para anotar le convertían en una bomba para el futuro desde la cantera blanca. Pero cuando se rompió la rodilla en 2014 empezó su calvario. Después fichó por el PSG y ha acumulado cuatro cesiones, todas ellas sin demasiado brillo. Ahora, en la campaña 2020/21, con 27 años, el canario busca su sitio junto a Neymar Júnior y Kylian Mbappé como escudero de oro de la mejor pareja de delanteros del mundo.

El jugador nacido en Las Palmas de Gran Canaria fue una de las grandes alegrías del madridismo y también la prueba evidente de que una lesión puede cambiar por completo la vida de un futbolista profesional. La suya se produjo cuando estaba asentado no solo en el Madrid, sino en el equipo titular blanco y como decimos en 2014, concretamente ante el Schalke 04 en octavos de final de aquella Champions League. Posiblemente la calidad mostrada entonces le valió para fichar por 25 kilos por el Paris Saint-Germain, lugar en el que ahora se le busca hueco.

El español, de 27 años, está en plena madurez en su carrera, justo en ese punto en el que puede intentar resurgir de sus cenizas o pasar al ostracismo. Pero parece que esta vez sí puede lograr volver a ser importante ya que las salidas de Edinson Cavani y Choupo-Moting de la disciplina gala, unido al hecho de que el futbolista español es en el equipo francés el sustituto natural por características tanto del 10 del PSG como de la estrella de Les Bleus, le colocan ante una oportunidad de oro de disputar minutos de calidad en el campeón francés.

Y es que tanto Neymar Júnior como Kylian Mbappé la pasada campaña se perdieron bastantes choques, dejando muchos minutos a repartir entre sus sustitutos, de los cuales podría este año beneficiarse un Jesé que se está machacando en verano para llegar al mejor nivel posible al grupo y convencer a Thomas Tuchel de que puede contar con él esta temporada. De ser así, Jesé volvería a ser ese esbozo de crack que asomaba en el Madrid hace ya seis años.