El PSG mete a Messi en el saco de Neymar: la limpia deja atónito a Mbappé y el Camp Nou se relame
Nasser Al-Khelaïfi se ha resignado a la salida de Leo Messi de París
Ya hace semanas que el PSG está sumido en una profunda crisis. Desde que los parisinos cayeron eliminados de la Liga de Campeones, no ha habido un solo día sin crisis en el seno del PSG. En este sentido, tras los múltiples rumores que situaban a Neymar más fuera que dentro del conjunto francés, hay que añadirle que cada vez cuentan menos con la renovación de Leo Messi. El argentino está más cerca que nunca de regresar al Barça y desde el Parque de los Príncipes consideran que no deben pensar en un futuro con el campeón del mundo.
Según cuenta el medio francés Le Parisien, Nasser Al-Khelaïfi ya estaría planificando los fichajes y las bajas de cara a la próxima temporada. En este sentido, según el citado medio, el PSG ya tiene claro que no va a renovar a Leo Messi y prepara la temporada 23/24 sin el argentino.
Según cuenta el citado medio, en París descartaron rápidamente la opción de subir el sueldo a Leo Messi, ya que, pese a que el padre pidió dicho aumento, Nasser Al-Khelaïfi se negó rotundamente, síntoma que demuestra la mala sintonía entre el club y el jugador y su entorno. Pues es evidente que, si algo no falta en el PSG, es dinero para pagar los sueldos que quieran. En este sentido, el conjunto parisino solamente accedería a una renovación bajo las mismas condiciones de su actual contrato.
La temporada de Leo Messi no es como para que en París estén disgustados, el argentino ha cuajado una muy buena temporada, solamente manchada por la trágica eliminación en los octavos de final de la Champions League. Messi acumula un total de 20 goles y 19 asistencias entre todas las competiciones, poco más se le podría pedir al recién coronado como campeón del mundo.
Así pues, se hace evidente que la falta de sintonía entre Lionel Messi y el PSG no es por temas deportivos. Ya que, si bien es cierto que fracasar año tras año en Champions es algo inaceptable, lo que realmente molesta en París, es ese coqueteo constante con la idea de un regreso al Barça, club al que detestan en la capital francesa.