Dos meses después Ousmane Dembélé da buenas noticias al FC Barcelona y perturba a Al-Khelaïfi
Terribles datos de El Mosquito en los últimos tiempos
Conforme Nasser Al-Khelaïfi decidió abonar los 50 millones que marcaba la cláusula de salida de Ousmane Dembélé del FC Barcelona se vaticinaron dos consecuencias muy importantes: por un lado, que Xavi Hernández perdería uno de los jugadores más diferenciales en la plantilla culé y que esto tendría efectos muy peyorativos en la temporada del equipo catalán y, por otra parte, que Luis Enrique sí que podría disfrutar del talento del crack francés en la capital gala.
No obstante, solo dos meses han bastado a Ousmane Dembélé para convertirse en el foco de las críticas en el Parque de los Príncipes, algo que inevitablemente supone un motivo de alegría para el FC Barcelona ya que Xavi, gracias a la fuga del atacante, pudo destapar a Lamine Yamal como una estrella mundial emergente, rindiendo el internacional español a un nivel mucho más satisfactorio que Dembélé.
Es cierto que ni mucho menos Ousmane es el único futbolista de la plantilla de Luis Enrique que está decepcionando a Al-Khelaïfi, pero sobre él se depositaron muchas esperanzas de cara a la consecución de títulos en este curso y su registro goleador justifica la cadena de críticas recibidas desde que debutó el equipo: 0 tantos.
Con Deschamps, más de lo mismo
A colación de esto, tanto Al-Khelaïfi como Luis Enrique y el propio Dembélé esperaban que el jugador aprovechara al parón internacional teniendo en cuenta su amplia participación habitual con Didier Deschamps, para recuperar sensaciones y volver a París dispuesto a hacer frente a las expectativas depositadas en él, pero nada más lejos de la realidad.
Sus intervenciones con les bleus para nada han sido resaltables y en este parón de selecciones se ha producido un hecho que aumentará esas dudas generadas por Dembélé durante los últimos tiempos con su falta de gol como factor protagonista: Benjamin Pavard, un defensa, ya ha esperado su compatriota en el cómputo global de tantos cosechados con el combinado galo, 5 por 4 del exfutbolista del Barça y actual quebradero de cabeza para Nasser Al-Khelaïfi.